El goteo en la venta de un libro lo pone de moda

El pasado fin de semana de Feria en Madrid, coincidimos con la directora editorial de Siruela, Ofelia Grande, quien nos explicó, asombrada y satisfecha, el éxito de uno de sus libros más recientes. Los editores son propensos a contar excelencias de las obras que publican. Es normal. Pero hay un detalle que delata si realmente están funcionando en las librerías: su goteo en ventas. Reposición y reposición en librerías medias o pequeñas, independientes, que obliga al sello a sacar nuevas ediciones.

Pues bien, el éxito de los últimos meses, el libro de moda entre los libreros, vaya, se titula La península de las casas vacías (Siruela) y es de David Uclés (Úbeda, 1990). Llegó a las estanterías el 6 de marzo y, poco a poco, se ha ido consolidando como el más repuesto. La propia editora estaba sorprendida. No aparecía en ninguno de los listados de más vendidos.

Y es que estos rankings se hacen básicamente con el volumen de ventas de las grandes librerías. El goteo no sale reflejado hasta que el boca a boca es tan fuerte que coge una velocidad endiablada. Muchos títulos han pasado por esa misma situación: Caperucita en Manhattan, de Carmen Martín Gaite, La sombra del viento, de Carlos Ruiz Zafón o El mundo de Sofía, de Jostein Gaarder.

Lo mejor de la novela, ambientada en un momento de la Historia de España tan comprometido y de confrontación como la Guerra Civil, es que la cuenta con la frialdad y la centralidad necesarias para dejar que sea la verdad quien se apodere de la ideología, acompañada de ingredientes de fantasía. Es la fantasía, probablemente, la que lo convierta todo en algo mucho más blanco.

Recurrir a ella parece ser mano de santo, como si lo equilibrara, en un país donde por poco se acaba a gorrazos. Menos mal que las gorras no hacen daño. Aunque Uclés ya nos pone en alerta desde la primera cita: "En España somos grandes cuando somos cien; más, nos entrematamos" (Max Aub).