TIEMPO PARA LEER

Miquel Roca, psiquiatra: "Leo en papel. Es un placer subrayar y anotar en los márgenes"

Psiquiatra, decano de la Facultad de Medicina y Catedrático de Psiquiatría de la Universitat de les Illes Balears (UIB). Es autor de diversos libros de psicopatología y psicofarmacología, y dirige equipos de investigación

El psiquiatra Miquel Roca.

El psiquiatra Miquel Roca. / EPE

Anna R. Alós

P. Como psiquiatra, ¿leer es fundamental?

R. Es una necesidad absoluta. La psiquiatría se aprende en los artículos científicos, y en la literatura de Montaigne, Proust, Céline, Pascal, Stendhal, Conrad, Faulkner, Pla, Chejov, Dostoievski, Shakespeare, tantos escritores latinoamericanos... Recogen observaciones imprescindibles para entender las conductas humanas, sean o no patológicas.

P. ¿La primera lectura que le deslumbró? 

R. No recuerdo un libro en especial, pero seguro que debe haber alguno. En el colegio había lecturas obligadas, algunas prescindibles, pero otras fascinantes. El impacto de La familia de Pascual Duarte fue descomunal, y El Quijote siempre queda en la memoria, quizás de manera impostada pero cierta. 

P. ¿Más recuerdos?

R. Sí, en la nebulosa de los años está El corazón de las tinieblas, de Joseph Conrad, o cómo nos iluminaban piezas de William Shakespeare sobre el género humano. También La peste o El extranjero, de Albert Camus. Después, las novelas rusas y francesas entraban en tu vida como tormentas, agitando.  

P. En el colegio ¿insistían en la lectura?

R. El hermano de La Salle que nos enseñaba francés lo hacía desplegando las enormes sábanas de las páginas de Le Figaro. Escribíamos en la revista del colegio y de ahí, unos imberbes todavía, saltamos a un diario local. Leer era una necesidad y un entretenimiento de primer orden en aquellos años. 

P. ¿Su género favorito hoy?

R. Apenas leo novelas a estas alturas de la vida y hago mucho caso a Josep Pla. Prefiero literatura de observación, diarios o dietarios, ensayos, poesía. Los Diarios de John Cheever son deslumbrantes.

P. Reflexiones que se publicaron después de la muerte del escritor.

R. Sí, y desde una mirada psiquiátrica más interesantes aún. Como El oficio de vivir, de Cesare Pavese, o los Diarios de Gil de Biedma. Hace poco he leído los dos primeros tomos de Diarios, de Iñaki Uriarte.

P. ¿Entre los poetas? 

R. Entre los cercanos, Caballero Bonald, Damià Huguet o Miquel Angel Riera en Mallorca, injustamente tratados en mi opinión literaria. T.S. Eliot, Charles Baudelaire o Paul Celan, entre los lejanos.

P. ¿Papel o libro electrónico?

R. Papel. Es un placer subrayar y anotar en todos los márgenes, volver a los libros y preguntarte por qué un día, hace meses o años, te llamó la atención una idea, un párrafo que ahora te parece banal.