¿Va el empleo como un "cohete", tal como presume el Gobierno?: Las 4 claves de los datos de mayo

El mercado laboral español ha perforado durante los últimos meses récords que hace un tiempo pudieren haber parecido propios de una galaxia lejana. El ciclo expansivo en el que lleva instalada la economía española desde que empezó a recobrarse del confinamiento está cogiendo más altura de la prevista por la mayoría. Y lo está haciendo con mayor resiliencia de la que pronotiscaban las distorsiones derivadas de la guerra de Ucrania y la mayor crisis de precios de las últimas dos décadas.

Es por ello que el Gobierno -o al menos parte del mismo- saca pecho de los datos de afiliación que la Seguridad Social publica mes a mes y considera que el mercado laboral español "va como un cohete". Aunque, como todo en la arena política, esa evolución del empleo no la interpretan todas las partes de igual modo y con el mismo ímpetu y el primer partido de la oposición, el PP, rápidamente ha salido al paso calificando de "engañosos" los datos mensuales. ¿Va realmente el mercado laboral como un "cohete"?

Mujeres y migrantes tiran del empleo

El mes de mayo cerró en España con 220.289 afiliados a la Seguridad Social más de los que tenía un mes antes, lo que representa el tercer mejor mes de mayo de la serie histórica, solo superado, por poco, por los registrados en 2018 y 2017.

Actualmente España tiene un total de 21,3 millones de personas cotizando a la Seguridad Social y en activo, nunca antes había habido tanta gente trabajando de manera simultánea, ni siquiera antes del estallido de la burbuja inmobiliaria.

Ese récord se explica por el crecimiento sostenido que ha venido registrando el empleo durante el último lustro. Entre mayo del 2020 y del 2024 se han creado 2,7 millones de empleos, mientras que entre 2004 y 2008, justo antes de la Gran Depresión, se crearon 2,2 millones.

Gran parte de esas estadísticas están sustentadas en la contribución de mujeres y migrantes. Desde el estallido del covid el empleo femenino ha crecido un 16,8%, frente al 13,3% registrado entre los hombres. Lo que ha permitido superar, por primera vez en la historia, la cota de los 10 millones de mujeres ocupadas. Aunque la variable 'nacionalidad' es todavía más determinante. Uno de cada tres nuevos empleos creados en el último lustro lo ha ocupado alguien nacido fuera de España, tendencia que durante este último año se ha acelerado a casi uno de cada dos.

Vuelta al paro que había antes de caer Lehman Brothers

Cuando el PP ha criticado el momento laboral que atraviesa la economía española lo ha hecho más bien a partir de los datos del paro. Este último mes de mayo la estadística dejó otra efeméride a este respecto y es que España ha rebajado los niveles de desempleo a 2,6 millones de desempleados apuntados al Sepe; los mismos que tenía antes de la caída de Lehman Brothers, inicio simbólico de la Gran Depresión.

No es lo mismo medir los datos de desempleo bajo un prisma nacional que internacional. El Gobierno destaca que el dato de desempleo es el más bajo en 17 años y la oposición le reprocha que la tasa de paro española es la más alta de la Unión Europea, doblando la media. Ambas afirmaciones son ciertas.

Dentro del propio Gobierno hay matices en cuanto a esa afirmación de que el empleo "va como un cohete". La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha destacado que ese empleo, en cantidad, cohabita con unos trabajadores que, en calidad, están perdiendo poder adquisitivo. A tenor de los últimos datos de convenios colectivos, los salarios están avanzando, de media, un 2,9% este año, frente a un IPC que se ha enfilado hasta el 3,6%, si bien las previsiones futuras los sitúan a la baja para final de año.

Efecto estacional

Otro argumento que utilizan los 'populares' para rebajar el entusiasmo gubernamental es en el carácter "estacional" del empleo creado. Mayo deja un buen número de ocupados porque en todos los mayos en lo que va de siglo XXI ha crecido el empleo, ya que las empresas se preparan para la campaña de verano y contratan a gente. 

La Seguridad Social publica cada mes un apartado con los datos desestacionalizados, es decir, aplica una serie de correcciones para evaluar como está evolucionando el empleo más allá de los vaivenes propios de la coyuntura. Si se observan dichos datos, los resultados puntuales son algo menos efusivos, pero el cómputo del último lustro queda prácticamente igual y confirma que las empresas están contratando en altas cantidades.

En términos desestacionalizados hay actualmente en España 2,1 millones de ocupados, frente a los 2,3 millones en términos medios. Y en los últimos cinco años el empleo ha crecido en 2,6 millones de personas, en términos desestacionalizados, y en 2,7 millones en términos medios.

A corto plazo, los datos de mayo revelan una cierta aceleración en la creación de empleo, ya que si en abril se crearon 40.677 empleos, en términos desestacionalizados, este último mes se subió a 62.505. La media el año pasado estuvo en 45.828 mensuales y este año va por los 58.581 ocupados.

Crecen más los asalariados que los autónomos

Durante estos últimos años en los que el empleo lleva instalado en un ciclo expansivo, la ocupación ha crecido sustancialmente más entre los asalariados que entre los autónomos. Desde 2020 las empresas han aumentado sus plantillas en un 14,9%, mientras que los autónomos 'solo' han crecido un 3,8%, es decir, casi cuatro veces menos.

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España se ha movido poco de esa horquilla de entre 3,2 y 3,3 millones de trabajadores por cuenta propia en la que lleva instalada casi una década. Si bien, por acumulación, los afiliados al RETA están en su mayor cifra desde 2008.

Haciendo suyo el refrán 'de mica en mica s'omple la pica', desde organizaciones como ATA -poco sospechosa de alabar gratuitamente al Ejecutivo de coalición- destacan el aumento registrado en mayo de 400 nuevos autónomos al día. Desde ATA también destacan que la gran mayoría de altas al RETA registradas en lo que va de año se concentran en Andalucía, Valencia y Madrid, tres feudos gobernados por el PP.