Empleo
EPA: Aumenta el empleo, pero persisten los desafíos estructurales
Durante el segundo trimestre de 2024, se crearon 434.700 nuevos puestos de trabajo, elevando el número total de ocupados a un récord de 21.684.700, pero la temporalidad se sitúa en el 15,95%, una de las más altas de Europa
El empleo suma 434.700 personas en el segundo trimestre y marca un récord con 21,7 millones de trabajadores
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha revelado los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al segundo trimestre de 2024. Los resultados indican que la tasa de desempleo se ha mantenido en un 11,27%, una cifra que sigue siendo preocupante a pesar del impulso estacional del empleo asociado con el verano.
Durante el segundo trimestre de 2024, se crearon 434.700 nuevos puestos de trabajo, elevando el número total de ocupados a un récord de 21.684.700. Este incremento representa un crecimiento del 2% respecto al trimestre anterior. La empleo se ha concentrado principalmente en el sector privado, que ha generado el 98% de los nuevos empleos. Dentro del sector privado, el sector servicios ha sido el principal motor de crecimiento, añadiendo 304.000 nuevos puestos. Otros sectores también han mostrado incrementos notables: la industria ha sumado 63.400 empleos, la construcción 61.100, y la agricultura 6.100.
A pesar del incremento en la creación de empleo, el crecimiento trimestral ha sido un 30% inferior al registrado en el mismo periodo del año anterior. Este dato sugiere una desaceleración en la recuperación del mercado laboral español. En términos interanuales, la ocupación ha crecido en 426.300 personas, el menor aumento desde 2014, excluyendo los años afectados por la pandemia. Estos números reflejan una tendencia de ralentización en la creación de empleo, lo que plantea serias preocupaciones sobre la sostenibilidad del crecimiento económico y la capacidad del mercado laboral para absorber a los nuevos trabajadores.
Temporalidad y Precariedad Laboral
Un aspecto crítico del mercado laboral español es la alta tasa de temporalidad, que se sitúa en el 15,95%, una de las más altas de Europa. Este fenómeno de precariedad es especialmente marcado en el sector público, donde la tasa de temporalidad alcanza el 28,96%, diecisiete puntos porcentuales más alta que en el sector privado. Aunque la reforma laboral implementada ha tenido un impacto positivo al reducir la temporalidad en el sector privado, queda claro que persisten desafíos significativos en términos de estabilidad laboral.
La tasa de paro femenino sigue siendo significativamente alta, situándose en un 12,61%. Este dato subraya la persistente desigualdad de género en el mercado laboral español, donde las mujeres enfrentan mayores dificultades para encontrar y mantener empleo. Además, el desempleo juvenil sigue siendo una preocupación alarmante, con una tasa del 26,58% entre los menores de 25 años. Aunque esta cifra ha mejorado ligeramente en comparación con el trimestre anterior, el número de jóvenes desempleados ha aumentado en 5.400 personas, evidenciando los retos que enfrentan los jóvenes para incorporarse al mercado laboral.
Un desafío persistente en el mercado laboral español es el elevado número de parados de larga duración. Alrededor del 40% de los desempleados llevan más de un año buscando trabajo. Aunque este grupo ha experimentado una ligera mejora, con una reducción de 17.600 personas en comparación con el trimestre anterior, sigue representando una proporción significativa del total de desempleados. La dificultad para reinsertar a estos trabajadores en el mercado laboral refleja problemas estructurales profundos que requieren soluciones políticas y económicas específicas.
La población activa ha aumentado en 212.100 personas durante el segundo trimestre de 2024, alcanzando un total de 24.440.000. Este crecimiento incluye incrementos tanto en hombres como en mujeres, y en ciudadanos españoles y extranjeros. La tasa de actividad ha subido 27 centésimas, situándose en el 58,90%. Este aumento es un indicador positivo de la capacidad del mercado laboral para atraer a más personas en edad de trabajar, aunque también refleja la necesidad de crear suficientes empleos para evitar el aumento del desempleo.
Desempeño Regional y Disparidades
Las disparidades regionales en el desempleo continúan siendo significativas. Navarra es la comunidad autónoma con la tasa de desempleo más baja, con un 7,42%, seguida de Baleares (7,95%), País Vasco (8,11%) y Aragón (8,25%). En contraste, las tasas de paro más elevadas se encuentran en Andalucía (16,27%), Extremadura (15,40%) y Castilla-La Mancha (13,92%). Estas diferencias regionales subrayan la necesidad de políticas laborales específicas adaptadas a las condiciones económicas y sociales de cada comunidad autónoma.
Por tanto, los datos de la EPA del segundo trimestre de 2024 presentan un panorama mixto para el mercado laboral español. Aunque se ha registrado un incremento significativo en la creación de empleo y una disminución en la tasa de paro, persisten desafíos estructurales como la alta temporalidad, la desigualdad de género y el elevado paro juvenil. La ralentización en la creación de empleo comparada con años anteriores y las disparidades regionales también son motivos de preocupación.
La economía española necesita implementar reformas profundas y sostenibles para enfrentar estos desafíos. Es crucial fomentar la estabilidad laboral, mejorar la capacitación y formación profesional, y adoptar políticas que impulsen la creación de empleo de calidad. Solo a través de estas medidas se podrá asegurar un mercado laboral más robusto y equitativo, capaz de ofrecer oportunidades reales para todos los ciudadanos y asegurar un crecimiento económico sostenido.