EDUCACIÓN

Los chavales ante la selectividad: "Sientes el peso de que es un solo examen, y si la cagas, la cagas"

Ocho alumnos que esta mañana empiezan las PAU en Cataluña explican cómo han vivido la cuenta atrás del examen

Alumnos preparándose para la selectividad, este lunes en Barcelona.

Alumnos preparándose para la selectividad, este lunes en Barcelona. / Jordi Otix

Marina Tovar

Ambiente de grandes ocasiones este lunes en la biblioteca Jaume Fuster de Barcelona, donde no cabe un alfiler. El día anterior al inicio de la selectividad, los alumnos de Bachillerato echan el resto para repasar y memorizar lo máximo posible. Muchos de ellos optan por estudiar en grupo para acabar de resolver dudas con sus compañeros. A medida que se sumen en la cuenta atrás de los exámenes que decidirán su futuro, los nervios van en aumento. Tomamos el pulso a este 'tourmalet' de emociones a partir de ocho chavales que a partir de hoy martes y hasta el jueves se enfrentan a la 'gran prueba'.

Cristina Serra.

Cristina Serra. / JORDI OTIX

Cristina Serra: "Los nervios han ido en aumento"

"Estoy bastante nerviosa, cada día que pasa lo estoy más", asegura Cristina Serra, quien espera llegar a la nota que necesita para estudiar Enfermería. Se encuentra repasando en una mesa de la biblioteca de la plaza de Lesseps de Barcelona junto con compañeros de instituto. "Nuestro profesor nos está ayudando mucho", agradece la joven.

David Rovira, este lunes en la Jaume Fuster.

David Rovira, este lunes en la Jaume Fuster. / JORDI OTIX

David Rovira: “Quiero cambiar de carrera y me faltaba una décima"

"Nunca he tenido nervios ante un examen, pero con este sí siento el peso de que es una única prueba y, si la cagas, la has cagado", admite David Rovira. David quiere estudiar Derecho y, de hecho, se presenta a la selectividad por segunda vez: "No he estudiado demasiado, pero confío bastante en mí mismo. Estoy repitiendo los exámenes porque quiero cambiar de carrera y me faltaba una décima". Lleva un año preparándose de forma autodidáctica, practicando a base de hacer exámenes de años anteriores y aprendiendo el nuevo temario con vídeos de YouTube. Al repetir el examen, tiene los nervios bajo control, pero sabe que este martes se jugará poder entrar al grado deseado.

Eloi Vilagran, este lunes en la biblioteca Jaume Fuster de Barcelona.

Eloi Vilagran, este lunes en la biblioteca Jaume Fuster de Barcelona. / JORDI OTIX

Eloy Vilagran: "Voy entrando en crisis de tanto en cuanto"

Eloy Vilagran es la primera vez que hace la selectividad, a pesar de que en el último año ha ido a una academia que confía en que le ayude a entrar a Adminsitración y Dirección de Empresas (ADE). "Voy entrando en crisis de tanto en cuánto", confiesa. "En la academia me han enseñado la nueva teoría y vamos estudiando con los exámenes de años anteriores". David, como Eloi, ha acudido a la Biblioteca Jaume Fuster para estudiar juntos el último día. Sin embargo, se han tenido que quedar en la cafetería: dentro no queda ni un hueco.

Pili Ocáriz, este lunes en Barcelona.

Pili Ocáriz, este lunes en Barcelona. / JORDI OTIX

Pili Ocáriz: "Nuestra generación está demasiado relajada"

"Estoy bastante nerviosa", explica Pili Ocáriz. "Llevo bastante tiempo preparándome pero aún me queda un poco”, añade. Quiere entrar en Biomedicina, carrera con nota de corte superior a 12. "Me he pasado muchas tardes en la biblioteca, hago exámenes de otros años y repaso mis apuntes". Aunque ella ha mantenido el acelerador apretado durante todo el curso, tiene la sensación de que no ha sido así entre su generación. "Creo que pocas personas están estudiando, me da la sensación de que nuestra generación está demasiado relajada".

Daniela Gassus, este lunes en Barcelona.

Daniela Gassus, este lunes en Barcelona. / JORDI OTIX

Daniela Gassus: "Hemos empezado a estudiar un poco tarde, pero aprobaremos"

Daniela Gassus comparte la misma idea: “Creo que todos hemos empezado a estudiar un poco tarde, pero acabaremos aprobándolo todo”. Ella quiere acceder a Arquitectura, y aunque lleva mucho tiempo estudiando, los nervios no la abandonan. “La nota que necesito no es muy alta, pero necesito que sacar buena nota en la selectividad”, explica. “Nuestro colegio nos ha dado material para estudiar, y tengo los exámenes de otros años, supongo que no me irá mal”.

Ferran Santín, este lunes en Barcelona.

Ferran Santín, este lunes en Barcelona. / JORDI OTIX

Ferran Santín: "Sin las lecturas obligatorias, el examen sería más difícil"

Aún no ha decidido qué carrera elegirá. Se debate entre Fisioterapia o CAFE, pero sabe que el examen es vital para poder estudiar lo que quiera. “Es muy importante, es una prueba que decidirá nuestro futuro”, explica. “Por suerte, yo siempre he sabido cómo tratar los nervios, y voy con bastante confianza”. Se alegra de que la selectividad de este año mantenga las lecturas obligatorias: "Creo que sin ellas, el examen sería mucho más difícil".

Daniel Aparicio, estudiante de segundo de bachillerato que se prepara para la selectividad.

Daniel Aparicio, estudiante de segundo de bachillerato que se prepara para la selectividad. / JORDI OTIX

Daniel Aparicio: "Tienes que hacerlo intentando dar el máximo"

"Las lecturas te las aprendes y es muy difícil fallar", señala también Daniel Aparicio. "Son casi dos puntos fáciles de conseguir. Si es más competencial, se puede complicar más". Ellos tienen claro que responderán a las preguntas de lecturas obligatorias. Aun habiendo estudiado, y la confianza que muestran, también temen por cómo les pueda ir mañana. "Lo llevo muy bien preparado, pero, a la hora de la verdad, estoy nervioso", confiesa. "Tienes que hacerlo y tienes que hacerlo intentando dar el máximo".

Sol Torres, este lunes.

Sol Torres, este lunes. / JORDI OTIX

Sol Torres: "He estado haciendo fichas con el vocabulario obligatorio"

Sol Torres, que espera acceder a Medicina, se muestra mucho más inquieta: "Tengo menos asignaturas, porque hago BachiBac, pero aun así estoy nerviosa". Confiesa que en su instituto le han ayudado mucho a prepararse, y que ella ha hecho bastante por su cuenta. "He estado escribiendo apuntes, diferentes esquemas y haciendo fichas con el vocabulario obligatorio", zanja. Su mesa está llena de papeles, y aunque se considera bastante preparada, seguirá estudiando hasta el último momento.