LEVANTE - EMV

Valencia termina la inauguración de la Gran Feria de Julio con "El novio de la muerte"

La oposición de Valencia responsabiliza a la alcaldesa Catalá por permitir el "retroceso casposo"

El concierto de las bandas de Cornetas y Tambores a pie del edificio municipal.

El concierto de las bandas de Cornetas y Tambores a pie del edificio municipal. / MIGUEL ÁNGEL MONTESINOS

Moisés Domínguez

La interpretación de El novio de la muerte como remate en el acto inaugural de la Gran Fira es el campo abonado que ha encontrado la oposición municipal para cargar contra los actos de la Feria y, por extensión, contra el equipo de gobierno en la gestión de las fiestas.

"Ni Gran, ni Fira ni de Valencia" es el lema con el que Compromís cataloga la programación, el espíritu y las líneas de la batería de festejos que organiza el ayuntamiento este mes. Y tras la inauguración, la formación naranja se ve con más munición. "Lo de El novio de la Muerte no se le habría ocurrido ni a Berlanga. Guardar los gegants, los nanos o el letrero de "Gran Fira" en un almacén y cambiarlo por el himno de la Legión. A esto se le llama, directamente, valencianofobia". 

El Grupo Municipal Socialista salió poco después -tras colgar en redes sociales el vídeo publicado por Levante-EMV, del mismo grupo editorial- y también hizo alusión al director de cine valenciano al tildarlo de "parodia berlanguiana".

Coinciden las dos formaciones en personificar la responsabilidad en la alcaldesa, como cabeza del gobierno de cohabitación. La portavoz de la coalición, Papi Robles y el anterior concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset han analizado unos festejos que ellos mismos gestionaron durante ocho años. Durante los días previos ya habían apuntado las líneas maestras a través de redes sociales, basadas en "la censura y la eliminación de todo lo que significa Valencia. Eso es lo que ha organizado la señora Catalá". Compromís apunta a la alcaldesa, a quien responsabilizan de la gestión de las Fiestas que lleva a cabo sus socios de Vox, para que el mensaje "duela" más a un partido, el PP, que el lunes no estaba precisamente muy contento con el remate militar del desfile inaugural. Precisamente en esa divergencia hurgan. "Estamos convencidos de que ni a los votantes del PP les ha debido gustar que, en la inauguración de la Fira, se eliminen los bailes valencianos por el himno de la Legión".

Y lo mismo hace el PSOE. El portavoz Borja Sanjuan decía, directamente, que "María José Catalá no ha podido evitar poner la nota casposa a la Gran Fira de Valencia al inaugurar las actividades con la interpretación de El novio de la muerte con cornetas. Vivimos un retroceso casposo sin precedentes”.

"¿Qué será lo siguiente? ¿Expojoven?"

Robles y Fuset han calificado los festejos como una "fireta" muy mal gestionada "por el PP y Vox", basada en el "odio a la identidad propia". Es "un acontecimiento gris, sin incidencia. Una oportunidad perdida". 

La "desvalencianización" es la crítica más recurrente. "Formulamos una pregunta sobre el uso del valenciano en los actos y nos dicen que un monólogo, un musical y las preselecciones. Son tan conscientes de la marginación que quieren contabilizar como programación en valenciano las preselecciones que organizan las Fallas. Cómo de sectario se puede ser para guardar en un almacén dos gegants [gigantes] que representaban a unos personajes valencianos que se plantaron en 1904 para celebrar la Feria". Les sirvió para recordar antecedentes, como "la Cabalgata de Reyes manchega, que se pagó a precio de oro. O la exaltación de la fallera mayor, sustituyendo el concierto de la Banda Municipal por un musical madrileño".

"Gobierna para una minoría en Blanco y Negro"

El socialista Sanjuán, a su vez, advierte, nuevamente a Catalá, que "esta no es la Valencia de verdad, la de la mayoría de personas que viven en la diversidad y la pluralidad, que defienden los valores democráticos. Ella se ha estancado en el siglo pasado y cada vez es más evidente que gobierna para una minoría de ultras que viven en blanco y negro”.