MÚSICA

¿Cómo sonaría la arquitectura de Antonio Palacios? Un pequeño festival lo desvela en el Hospital de Maudes

'Sonando por Palacios' propone cuatro actividades musicales muy cuidadas este fin de semana en uno de los edificios más espectaculares del arquitecto gallego que embelleció Madrid, con protagonistas como el prestigioso Dúo Cassadó

Patio del Hospital de Maudes, donde se celebrarán los conciertos.

Patio del Hospital de Maudes, donde se celebrarán los conciertos. / Comunidad de Madrid

Jacobo de Arce

Jacobo de Arce

Vínculos entre la música y la arquitectura los ha habido de todo tipo a lo largo de la historia. Podríamos partir incluso de su misma esencia: ambas tienen como elemento central la forma, y se dice que la música es una manera de organizar el tiempo como la arquitectura lo es de ordenar el espacio. Pero más allá de consideraciones filosóficas, la realidad es que la música, a pesar de su condición etérea y de que pueda sonar en cualquier parte, se beneficia a menudo de unos lugares diseñados y construidos donde guarecerse: que el ser humano lleve siglos edificando teatros de la ópera, auditorios, discotecas o sótanos donde albergar conciertos no es inocente.

El Ayuntamiento de Madrid ha querido subrayar ese vínculo entre las dos disciplinas con ocasión del 150 aniversario de Antonio Palacios, arquitecto gallego que dejó una huella considerable en Madrid en forma de algunos de los edificios más emblemáticos de la capital. El Palacio de Comunicaciones (hoy por hoy, casa principal del consistorio en Cibeles), el Círculo de Bellas Artes o la sede del Instituto Cervantes, por enumerar unos pocos, son obra suya.

Otra de sus creaciones emblemáticas, aunque a menudo olvidada, es el Hospital de Maudes, esa enorme y extraña edificación con un punto de cuento (¿podríamos decir ‘de aires harrypotterianos’?), cercana a la Glorieta de Cuatro Caminos, en Raimundo Fernández Villaverde. Un antiguo hospital de jornaleros destinado a atender sin coste a los más humildes cuando la sanidad universal y gratuita todavía no existía. Abandonado durante décadas y restaurado hace unos años, el edificio abre sus puertas al público este fin de semana para acoger varios conciertos que ponen en relación al arquitecto con diferentes músicas conectadas con aspectos de su vida. Sonando por Palacios es una ocasión única para conocer una construcción que durante mucho tiempo fue un misterio para los madrileños. Y la entrada es gratuita, aunque requiere inscripción.

El Hospital de Jornaleros de Maudes, ubicado cerca de la Glorieta de Cuatro Caminos.

El Hospital de Jornaleros de Maudes, ubicado cerca de la Glorieta de Cuatro Caminos. / ARCHIVO

“Lo que queríamos es poner en valor la figura y el legado de Antonio Palacios a través de otro tipo de patrimonio que muchas veces se olvida, y que es el patrimonio musical”, explica a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA Marta Espinós, pianista y comisaria musical que ha sido la encarga de poner en pie este pequeño y exquisito festival. “Como estamos hablando de un arquitecto y de un urbanista, queríamos desplegarlo como un mapa, como un plano sonoro en el que hemos trazado cuatro itinerarios a través de músicas de diferentes estilos. Estarán ahí contenidas varias rutas por Madrid, la ciudad que él habitó y diseñó, pero también escapadas a su Galicia natal o sus viajes y sus destinos internacionales”.

En los dos días que el Hospital de Maudes acoge el ciclo, esa faceta más internacional de Palacios se va a plasmar en el concierto Swing de ida y vuelta, que conectará con “músicas y arquitecturas internacionales, americanas sobre todo, porque Palacios tuvo una gran influencia de corrientes como la Escuela de Chicago, aunque también del secesionismo vienés”. Los encargados de hacerlo serán la Gran Orquesta Florida, creada para la ocasión en recuerdo del desaparecido Hotel Florida, obra de Palacios, con la dirección de la cantante Pía Tedesco y el violinista Raúl Márquez. Será el 14 y 15 junio a las 22:30 h y el 16 junio a las 21:00 h.

La cara gallega del asunto, porque el arquitecto era de Porriño (Pontevedra) y “mantuvo una estrecha relación con la cultura de su tierra y con el grupo de intelectuales galleguistas de la Xeración Nós”, estará representada por el concierto De Porriño al cielo, en el que el dúo Caamaño&Ameixeiras, acordeón y violín acompañando a la voz, interpretarán sus composiciones de raíz galaica (14 y 15 junio, 21:00 h y 16 junio, 19:30 h). Habrá también una actividad familiar, "porque en toda buena planificación urbanística se tiene que tener en cuenta a los niños", dice la comisaria: será el divertido concierto familiar El fantasma de Palacios. Sonidos y enigmas del antiguo Hospital de Maudes, que recupera la misteriosa historia de los sonidos que se escuchaban en el edificio hace décadas, cuando estaba abandonado.

El Duo Cassadó, uno de los protagonistas del festival.

Marta Moll de Alba y Damián Martínez Marco forman el Dúo Cassadó, uno de los protagonistas del festival. / Cedida

Pero el vínculo más estrecho de todos, el que el arquitecto mantuvo con la ciudad donde más trabajó y pasó la mayor parte de su vida, Madrid, es el que se explora en Mapa musical de Palacios. Una ruta guiada por el patrimonio arquitectónico y sonoro. Marta Moll de Alba, pianista y mitad del Dúo Cassadó, la formación a la que se le ha encomendado esta labor, explica lo que van a hacer en Hospital de Maudes. “A la comisaria y a mí se nos ocurrió hacer una ruta arquitectónico-musical, y para eso hemos elegido un programa con obras que prácticamente todas están compuestas en la misma época que algunos de los edificios de Palacios. Interpretaremos piezas de Falla, de Gaspar Cassadó… pero no te puedo contar más”, se disculpa para no desvelar algunas sorpresas.

Además de interpretar esas piezas, el prestigioso dúo de piano y violonchelo con base en San Sebastián, que trabaja desde sus orígenes un repertorio amplio que abarca desde el barroco hasta composiciones actuales, desvelarán el por qué de esas conexiones entre las músicas que allí sonarán y la figura de Palacios. Moll de Alba reconoce que ese vínculo entre la arquitectura y la música no lo habían trabajado nunca en concierto, pero explica que “nosotros siempre buscamos vínculos con otras artes, porque pensamos que enriquece tanto a los artistas como al público, y al final todo es creación”. Lo de este fin de semana en el Hospital de Maudes es una ocasión perfecta para encontrarse con dos de las mejores expresiones de esa creación: una más material, que es donde vivimos, y otra más abstracta, sonora, que es la que nos permite seguir viviendo.