El CSD remite una carta al secretario general de la FIFA: "Querido Mattias, tanto Valencia como Vigo están preparadas"

A falta de cinco días para que concluya el plazo de presentación de candidaturas de las sedes para el Mundial 2030 -el próximo 31 de julio-, el Consejo Superior de Deportes (CSD), a través de su presidente, José Manuel Rodríguez Uribes, ha remitido una carta a la FIFA (Federation International Futbol Asociation) , y en concreto a su secretario general, Mattias Grafström, al que alude de manera manuscrita con un "Querido Mattias".

La misiva pretende informar al máximo organismo federativo internacional de fútbol que en estos próximos días el CSD remitirá un "dossier con las garantías de seguridad y orden público, financieras, de sostenibilidad y de respeto y promoción de los derechos humanos que, desde el Gobierno de España asumimos para asegurar la mejor celebración de la competición".

Valencia y Vigo, "dos ciudades extraordinarias"

Pero esta carta se refiere, sobre todo, al reparto de sedes entre los tres países que organizan el campeonato y en concreto al anuncio oficial de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) en el que finalmente incluyó nueve ciudades y once estadios como sedes nacionales para los partidos a disputar en territorio español, una decisión que "deja fuera de la organización de partidos de este gran campeonato (y, por tanto, de la distribución de sus beneficios económicos, sociales e incluso emocionales) a dos ciudades extraordinarias, Valencia y Vigo, cuyos clubes, históricos y señeros, militan en la máxima categoría de la Liga", reza el escrito del CSD.

Relata la misiva fechada en este viernes 26 de julio que "estas dos ciudades son, además, fundamentales para la vertebración territorial de nuestro país", definiendo a Valencia como "una de las grandes capitales del Mediterráneo", mientras que de Vigo, destaca su "estrecha vinculación con Portugal, en particular con la ciudad de Oporto".

"Es nuestra obligación anticipar soluciones"

De ahí que la CSD concluya que "tanto Valencia como Vigo estarán preparadas", y remarca que "las once ciudades juntas son garantía de respuesta ante cualquier eventualidad que pudiera producirse en el futuro, a lo largo de los próximos 6 años". Una declaración de intenciones del organismo gubernamental deportivo que pretende que las dos sedes descartadas por la RFEF no queden descolgadas de este mapa de estadios, ya que "como gobierno es nuestra obligación anticipar soluciones y pensar en el interés general, en el bien común y en el impacto del Mundial 2030", que más allá de lo fútbolistico "es evidente" que incide, según asegura la CSD, en "el empleo y el desarrollo económico y urbano.

Los estadios aprobados

En principio, y según el anuncio de la RFEF, España tendrá partidos del Mundial 2030 en los estadios de: Anoeta (Donostia), Camp Nou (Barcelona), Gran Canaria (Las Palmas), La Cartuja (Sevilla), La Rosaleda (Málaga), Metropolitano (Madrid), Nueva Romareda (Zaragoza), RCDE Stadium (Cornellá-El Prat - Barcelona), Riazor (A Coruña), San Mamés (Bilbao) y Santiago Bernabéu (Madrid), el estadio mejor posicionado para albergar la final. Mestalla se quedó fuera por el bloqueo que produjo la recalificación urbanística que exigió Peter Lim, propietario del club valencianista; y Vigo, por la supuesta incierta remodelación del estadio de Balaídos. Motivo alejado del que esgrimen desde el propio concello de la urbe olívica, que a través de Javier Pardo, teniente alcalde y concejal delegado del área de Fomento y Servicios del Concello de Vigo, denunció hace unos días una “movilización política” en contra de su ciudad para dejarla fuera del Mundial 2030.

Respecto a los otros dos países anfitriones, Marruecos contará con seis sedes: Rabat, Tánger, Fez, Agadir, Marrakech y Casablanca, donde se está construyendo el estadio más grande del mundo para rivalizar con el Bernabéu por final. Por su parte, Portugal acogerá partidos en tres campos: Da Luz y Jose Alvalade en Lisboa; y Do Dragao en Oporto.