EL CORREO DE ANDALUCÍA

La lucha vecinal contra la privatización del faro de Trafalgar: "Es como si convierten la Giralda en una tienda de souvenirs"

La Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz adjudicó el pasado octubre la explotación de un restaurante situado en este edificio del siglo XIX

Varios colectivos vecinales de la zona han presentado hace unos días 10.000 firmas para proteger este espacio de cualquier tipo de uso comercial

El faro de Trafalgar, situado entre Zahora y Los Caños de Meca.

El faro de Trafalgar, situado entre Zahora y Los Caños de Meca. / DAVID GALINDO | WIKIMEDIA

Frente al cabo donde lucharon en 1805 Gravina, Villeneuve y Horacio Nelson, a solo unas millas del lugar donde tronaron los cañones del Santísima Trinidad y del Victory, quieren montar un restaurante. Esa es la propuesta de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, que en octubre del pasado año adjudicó a la compañía sevillana Pentágono Colón SL -propiedad del conocido empresario Rafael Cebolla- la concesión para explotar un local hostelero en el faro de Trafalgar, donde también iría un centro de interpretación.

Desde el primer momento varios colectivos vecinales se opusieron a esta idea. Un movimiento de rechazo que tiene su último episodio hace solo unos días, cuando representantes de la plataforma El faro no se vende y de Ecologistas en Acción entregaron en la sede de la Autoridad Portuaria 10.000 firmas de ciudadanos a favor de protegerlo "contra cualquier tipo de explotación comercial", tal como recogen en la petición creada en Change.org.

"En su momento presentamos alegaciones por escrito al expediente, y ahora hemos recogido todas estas firmas porque nos parece indigno que hagan esto con nuestros hitos ambientales e históricos", afirma Lola Yllesca, responsable de comunicación en Andalucía de Ecologistas en Acción. "Un sitio tan emblemático no se puede mantener a razón de convertirlo en un restaurante y bar de copas", critica Yllesca.

En la misma línea está José Antonio Mármol, presidente de la asociación de vecinos de Zahora: "En 2014, cuando presentaron un proyecto para hacer allí un hotel, redactamos escritos en contra de la privatización del faro. Ahora, diez años después y con otro plan parecido, nos volvemos a oponer", cuenta. "Creemos que debe ser algo público, no un negocio. En la actualidad puede ir cualquiera; cuando sea un restaurante de lujo, no será ya un espacio para todo el mundo", manifiesta Mármol.

La Mancomunidad de la Janda, también en contra

Y no solo los vecinos: esta propuesta llevada a cabo por la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz tampoco la ven adecuada desde la Mancomunidad de municipios de la comarca de la Janda. "Desde el principio hemos trasladado que hay que dinamizarlo desde lo público. Se puede intentar que siga siendo un referente, pero no a costa de privatizar un patrimonio", declara Javier Rodríguez, presidente de esta entidad.

"Mi sensación con este tema es agria. Creo que antes de preparar un proyecto dentro de un bien público, se debería consultar a las instituciones y asociaciones de la zona", asevera Rodríguez. "La solución no pasa por transformar el faro en una herramienta de ocio".

El propio Javier Rodríguez asegura que la Mancomunidad se ha adherido a las cartas y escritos elaborados por los colectivos vecinales. "Incluso firmamos uno en el que se pedía la declaración de Bien de Interés Cultural para proteger este faro construido en 1862", apunta este representante socialista.

Ni agua ni saneamiento

Las reivindicaciones, más allá del valor histórico y medioambiental, se centran también en la falta de infraestructuras necesarias en este espacio. "Nos llama la atención que un estamento público conceda una licencia de apertura a un negocio en un sitio sin agua ni saneamiento", señala Lola Yllesca. "¿Plantean entonces abrir una fosa séptica?", se pregunta.

"No hay alcantarillado, no hay agua… Allí hay una serie de dificultades que hacen incomprensible que se ejecute una cosa tan innecesaria", dice Antonio Aragón, miembro de Enebro-Ecologistas en Acción, la delegación comarcal de esta organización. "No tenemos servicios, no se ponen señales viales, no hay agua potable… Vivimos una situación tercermundista desde hace muchos años", critica José Antonio Mármol.

"Vemos con sorpresa cómo se va a dotar a un proyecto privado de unos servicios básicos que no pueden disfrutar muchos vecinos", afirma Javier Rodríguez. "En Los Caños de Meca y Zahora tienen infraestructuras obsoletas, y llevan bastante tiempo denunciándolo", añade el presidente de la Mancomunidad de la Janda.

Según aclara la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz a este periódico, "en el pliego de condiciones se recogía las necesidades del faro en este sentido y se exigía un plan de actuación al respecto que la oferta seleccionada incluye y resuelve". Asimismo, señala que "aún no se puede concretar la fecha exacta de apertura".

En un tómbolo declarado monumento natural, justo donde la flota británica venció a la alianza francoespañola hace más de dos siglos, quieren montar un restaurante. "Salvando las distancias, es como si convertimos la Giralda en una tienda de souvenirs para pagar el mantenimiento", ejemplifica Lola Yllesca. El proyecto, de momento, sigue adelante. Y con él la posibilidad de pedir dos tintos de verano en un faro histórico, el de Trafalgar.