Opinión | EUROCOPA 2024

España es lo que siempre nos contaron que era Alemania

Durante décadas nos avasallaron con la frase de Lineker, con eso de que "el fútbol es un deporte en el que juegan 11 contra 11 y siempre gana Alemania". Quizás, y solo quizás, empieza a tocar reescribirla. Porque no siempre, pero sí muchas veces, más que ninguna otra selección, la que gana es España

Álvaro Morata besa la Eurocopa.

Álvaro Morata besa la Eurocopa. / Frank Augstein

Puede sonar paradójico, pero es posible que el tipo que mejor describió la gesta de España en la Eurocopa fuera un inglés. Apenas habían pasado unos segundos desde que el equipo de Luis de la Fuente había reconquistado Europa cuando Peter Drury, narrador de Sky Sports, lanzó en un mensaje cargado de elogios y de, implicitamente, envidia por ver frente a frente lo que podría ser su selección y no llega a ser, por mucho que cuente con una de las generaciones, libra por libra, más potentes de su historia.

"España. Campeona de Europa. Otra vez. El mejor equipo ha vencido. Una vez más, esta nación entusiasmada por el fútbol ha llegado a la fiesta y ha protagonizado el baile más bello. Jóvenes, frescos, libres y campeones de Europa. Jugaron siete partidos, ganaron siete. La bella sonrisa de un joven equipo. El juego de esta nación ha embellecido este torneo, y ahora, además, lo ha ganado", resumió el narrador inglés, en un discurso cargado de sincera admiración.

Eso es lo que provoca España en el extranjero. Y por eso sorprende que antes de la final empezara a circular el discurso de que, pasara lo que pasara, la Eurocopa de España ya era un éxito. Que poco menos que no pasaba nada si se perdía, porque estar donde nadie creía hace un mes que fuera posible ya era un logro. Un mensaje torticero, victimista, poniendo la venda por delante de la herida cuando no tocaba, y sobre todo innecesario, viendo lo que había demostrado la selección durante todo el torneo.

"Una vez más"

Porque España se había ganado a pulso la etiqueta de favorita. Y también, de paso, porque la historia reciente no indicaba que hubiera nada que temer. Si algo ha demostrado el fútbol español en este siglo es que cuando tiene a tiro ganar, gana. Dijo una vez Luis Aragonés aquello de que "del subcampeón no se acuerda nadie", y el mensaje, pese a tener algo de topicazo, parece que pervive de generación en generación en el deporte español.

"Una vez más", como decía Drury, la Copa de Europa se vestirá lazos rojos y amarillos durante cuatro años. Esa es la clave, la rutina de "ganar, ganar y ganar". Ya van tres en los últimos 16 años. Cuatro si sumamos el Mundial de 2010. A mis 30 años recién cumplidos, he visto a la selección ganar casi tantos grandes torneos como ha perdido.

El capitán de la selección española Álvaro Morata levanta el trofeo junto a sus compañeros durante la celebración de la victoria de la Eurocopa, tras vencer a Inglaterra en el partido de la final disputado este domingo en el Estadio Olímpico de Berlín.

Álvaro Morata levanta el trofeo de la Eurocopa durante la celebración de la victoria de España / Alberto Estévez

Cierto es que mi primer recuerdo, difuso, es el infame atraco de Al-Ghandour en Corea y Japón, un antes y un después en el historial de dramatismo de la selección. En estos 22 años que han pasado desde entonces, nadie ha ganado más en Europa. La todopoderosa Alemania solo triunfó una vez, en el Mundial de 2014. Lo mismo que Francia, en su caso en en de 2018. Italia ha sumado una Eurocopa (2021) y una Copa del Mundo (2006), pero también ha protagonizado varios batacazos que le han llevado a quedarse fuera de varias fases finales.

Para los que venían de vivir una ristra de episodios como el de la semifinal ante Corea del sur en 2002, bañadas por las lágrimas de Joaquín, lo de ahora era inimaginable, supongo España ya tiene cuatro Eurocopas. Más que Alemania (3) y tantas como Francia (2) e Italia (2) juntas. Suena fuerte. Siempre nos avasallaron con la frase de Lineker, con eso de que "el fútbol es un deporte que inventaron los ingleses, en el que juegan 11 contra 11 y siempre gana Alemania". Quizás, y solo quizás, empieza a tocar reescribirla. Porque no siempre, pero muchas veces, más que nadie, gana España.