Tamara Falcó y el parecido de su vestido de novia con el de la Reina Letizia ¿Casualidad o le echó el ojo?

Este fin de semana tuvo lugar en 'El Rincón' la boda más exclusiva del año. Nada más y nada menos que la boda de la marquesa de Griñón, que contraería matrimonio con el empresario y jefe de las noches, Íñigo Onieva. Digo jefe de las noches porque ya sabemos que antes de que tuviera lugar esta boda, que parecía que no, se ha visto envuelto en diferentes polémicas que enlazaban al empresario con la noche madrileña.

Sin embargo, a pesar de las cientas de polémicas, la boda ha ocurrido y ya se puede decir que Tamara Falcó e Íñigo Onieva son marido y mujer.

La exclusiva de la boda

La boda celebrada el pasado sábado 8 de julio pensábamos que sería mediática y que tendríamos todos los detalles al dedillo en cuánto los invitados empezaran a subir stories a Instagram del encuentro en 'El Rincón'. Sin embargo, como ya se había adelantado, la revista Hola!, tenía la exclusiva completa de la boda. Esto hizo que todos los invitados tuvieran que dejar los teléfonos móviles antes de entrar en la boda para que no se filtrase nada.

Marido y mujer tenían que ir con pies de plomo para que no se destapara nada de la boda. Si algo salía a la luz antes de que la revista diera la exclusiva, ya podían olvidarse del millón de euros que van a recibir.

El vestido de Tamara

Dos meses antes de la boda, Tamara Falcó se vio inmersa en otra polémica, pero esta vez no con Íñigo, sino con su vestido de novia. La marca con la que trabajaba desde hacía ya meses para hacer su vestido de bodas publicaba un comunicado públicamente en el que rompían el contrato con la marquesa.

"Lamentablemente, el acuerdo entre Sophie et Voilà y la señora Falcó para la confección de su vestido de novia ha tenido que ser resuelto como consecuencia del incumplimiento contractual por parte de la señora Falcó", comienza el comunicado en el que, sin desvelar exactamente el motivo de su decisión de romper con Tamara, sí dejan entrever que el motivo tendría que ver con las exigencias que Tamara ha impuesto para la creación de su vestido: "Sentimos un profundo respeto por la creación artística de otros compañeros y nuestra ética empresarial nos impide traspasar ciertos límites que pondrían en peligro la autoría original del diseño", publicaba la marca.

La reina Tamara o la reina Letizia

Si bien, ahora podríamos entender a las 'exigencias' y 'el parecido' del que hablaba Sophie et Voilà. Igual lo que no querían, era plagiar y hacer un vestido que tuviera un cierto parecido al de la Reina Letizia confeccionado por la marca Pertegaz.