ELECCIONES EN AMÉRICA LATINA

Claudia Sheinbaum, la favorita del caudillo de México

Hermética y, a diferencia del actual presidente AMLO, dotada de escasa capacidad de conectar con la audiencia, su principal activo es ser la favorita del actual presidente

Claudia Sheinbaum, la promesa de la continuidad de López Obrador.

Claudia Sheinbaum, la promesa de la continuidad de López Obrador. / EFE

Dicen los comentaristas políticos en México que la candidatura de Claudia Sheinbaum a las presidenciales por el partido Morena ya se daba por sentada desde hacía años. Todo el mundo sabía que la mujer que se convertirá en la primera presidenta del más poblado Estado hispanohablante era la favorita del actual presidente Andrés Manuel López Obrador -también conocido como AMLO- para sucederla.

Por esta razón, con o sin argumentos, cuando tras vencer en las primarias del partido izquierdista fue proclamada candidata, Marcelo Ebrard, el aspirante rival, calificó la elección de fraudulenta e incluso abrió la puerta a su salida de la formación política. El pulso interno fue solventado al poco tiempo con regalías para el derrotado: un entendimiento para solventar futuras irregularidades en elecciones internas, mayor visibilidad para su corriente política dentro de Morena, y un anuncio como aspirante a candidato presidencial por Morena para las siguientes presidenciales, a celebrar en 2030.

La proximidad de Sheinbaum con AMLO ha despertado no pocas suspicacias en amplios sectores sociales en México, temerosos de que en realidad sea él quien continúe influyendo desde la sombra e incluso propiciando la acusación de que en realidad podría estar calentándole la silla para un futuro regreso del actual presidente.

Como Putin y Medvédev

Una denuncia formulada en las páginas de 'The Financial Times' por el historiador Enrique Krauze citando el ejemplo de Dmitri Medvédev y Vladímir Putin, y que podría materializarse si la victoria de Morena termina siendo abrumadora en la Cámara de Diputados y el Senado, concediéndole a esta fuerza política una mayoría suficiente para enmendar la Constitución.

"Su programa es una calca del de AMLO", subraya para El Periódico, del mismo grupo editorial que este medio, Dolia Estévez, una conocida periodista mexicana, quien recuerda cómo algunas de las propuestas más polémicas del presidente saliente, como la posibilidad de elegir por sufragio popular a los miembros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la más alta instancia judicial del país y uno de los principales contrapesos a Morena y al jefe del Estado durante su mandato, han acabado siendo asumidas por Sheinbaum.

Trabajadora, con excelente educación académica en Física e Ingeniería por la Universidad Autónoma de México y experta medioambiental, carece, a diferencia de AMLO, de talento natural para conectar con las audiencias, y rehúye de las entrevistas, en particular las que le pueden poner en un brete. "Su principal activo" es precisamente contar "con la bendición" del presidente saliente, constata Estévez. Hermética y poco expresiva, constituye un verdadero enigma para muchos en México. Eso sí, en todo el periodo preelectoral sí pudieron entreverse ciertas tendencias autoritarias, que en este caso sí compartiría con su mentor.

En el verano pasado, cuando fue abucheada por los partidarios del candidato rival Ebrard durante las controvertidas primarias de Morena, abroncó a Enrique Durazo, personalidad encargada de coordinar la elección interna partisana: "Ya me cansé, ¡a donde llego, me respetan!", le exigió, sin apercibirse que estaba siendo filmada por las cámaras en ese momento.