Nueva legislatura en Europa

Cómo dinamitar Europa desde dentro: estas son las propuestas de los Hermanos de Italia de Giorgia Meloni para la UE

La ultraderecha italiana promueve una Unión Europea donde cada país cuida de sí mismo

La primera ministra italiana Giorgia Meloni.

La primera ministra italiana Giorgia Meloni. / Roberto Monaldo/LaPresse via ZUM / DPA

Irene Savio

Vuelta atrás. Una Europa del pasado, de países soberanos en el que las reglas nacionales se imponen sobre las europeas, sin solidaridad ni cohesión. Así es la Unión Europea que, aun con cierta astuta 'finezza' —especialmente desde que es primera ministra— promueve la líder de Hermanos de Italia, Giorgia Meloni, también dirigente del grupo europeo de Reformistas y Conservadores (ECR). El objetivo no es salir del bloque, sino dinamitarlo desde dentro. Es lo que se refleja, más allá del palabrerío, su programa en las últimas elecciones europeas. Otro indicio, su eslogan: "La Italia que cambia Europa".

La relación con la UE y la OTAN

El ferviente atlantismo de Meloni, heredado del posfascista Movimiento Social Italiano, junto con devota sintonía con EEUU, han jugado a su favor para su plena aceptación en Washington. En paralelo, su principal arma para desactivar las reticencias de muchos líderes europeos fueron las formas: desde que está en el poder, ha abandonado todo lenguaje ofensivo en sus críticas a la UE. Pero el núcleo de sus ideas sigue ahí: Meloni no quiere más Europa, es una euroescéptica de la integración europea. Como se lee en su programa, considera que la UE es "débil" y está "paralizada por la burocracia". La propuesta es, en síntesis, revertir los procesos de integración y establecer una coexistencia de Estados nacionales fuertes y autónomos que colaboran en temas puntuales, en particular en Política Exterior y Defensa.

La guerra en Ucrania

La postura de Meloni sobre Ucrania es quizá una de las más inequívocas dentro del bloque europeo: desde el inicio ha sido una firme defensora de un convencido sostén político y militar a Ucrania. Su razonamiento: cualquier negociación con Rusia sería perjudicial para Ucrania si Kiev estuviese en gran desventaja en el campo de batalla. Con ello, Meloni incluso se ha enfrentado a reticencias de una parte del Ejército italiano que expresó preocupación ante la eventualidad de que Italia se quedase desprotegida por las entregas de armamento —en ellos, los sistemas de defensa aérea SAMP/T— al país eslavo.

El conflicto de Oriente Próximo

En la guerra de Israel contra Gaza, Meloni ha mantenido una posición de plena alineación con EEUU. Esto se ha visto más veces en la Asamblea General de la ONU. Tanto es así que el Gobierno italiano incluso se abstuvo de votar a favor de la reciente resolución para ampliar el estatus de Palestina, a pesar de las presiones de la oposición. Pese a ello, en sordina —eso sí—, Meloni sí se movilizó en estos meses para permitir la evacuación de diversas familias de gazatíes, que hoy se encuentran asiladas en Italia. Aún así, el tema no fue incluido en su programa electoral.

Inmigración

La lucha contra los traficantes de personas y la protección de las fronteras exteriores de la UE ha sido uno de los eslóganes de Meloni durante la campaña electoral. También aparece en su programa. Su propuesta es, en extrema síntesis, una Europa blindada que dé dinero a los países de origen y tránsito para frenar los flujos migratorios. Una estrategia que Italia ya puso en práctica en la época de Silvio Berlusconi con Libia y que ahora Meloni también está llevando adelante con Túnez; todo, pese a las críticas de violencias contra los migrantes en ambos países.

Cambio climático

Pese a ser Italia uno de los países del Mediterráneo gravemente afectados por el cambio climático, Meloni ha optado recientemente por defender las exigencias de los agricultores europeos que se quejan por el Pacto Verde. Tanto es así que el tema aparece también en su programa electoral, en el que figuran propuestas como el rechazo al futuro etiquetado de alimentos (el Nutri-score) en la UE, la revisión de la política agrícola común y, más en general, la puesta en discusión de cualquier medida que afecte a esta industria.

Derechos de las mujeres

Una de las grandes obsesiones de Meloni son las teorías llamadas 'gender', que considera que castigan a la mujer al negar su diferencia biológica con los hombres. Eso es algo que Meloni pretende impulsar también en Europa. Por el contrario, en su programa, no hay mención alguna al aborto, un tema que ha causado discusión por el creciente hostigamiento que ejercen en Italia los antiabortistas contra las mujeres. Batalla histórica del fundamentalismo católico, Meloni ya logró que el Parlamento italiano apruebe una ley que permite la entrada de estos grupos en centros de asesoramiento para mujeres que quieren abortar.

Derechos del colectivo LGTBI

La palabra LGBTI no aparece en el programa europeo de Meloni. Lo que no es sorprendente. Desde hace años, hábilmente, Meloni ha hecho de la lucha contra la baja tasa de natalidad italiana uno de sus grandes caballos de batalla, algo que ha ido emparejando con el rechazo de modelos de familias distintos a los integrados por un hombre y una mujer que se reproducen. Así se explican sus límites a las familias homosexuales y lesbianas que quieren tener hijos, y su firme oposición a los vientres de alquiler; asunto, este último, que también ha prometido llevar a Bruselas.