GUERRA EN ORIENTE PRÓXIMO

Save The Children cifra en 21.000 el número de niños palestinos desaparecidos en Gaza

Este mismo mes, la Organización Mundial de la Salud aseguró que más de 8.000 niños en Gaza han sido tratados por malnutrición aguda, incluidos unos 1.600 que la padecen en su forma más extrema

Un niño palestino junto a un edificio destruido por los bombardeos del Ejército de Israel contra la ciudad de Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza (archivo)

Un niño palestino junto a un edificio destruido por los bombardeos del Ejército de Israel contra la ciudad de Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza (archivo) / Europa Press/Contacto/Omar Ashtawy

Ricardo Mir de Francia

En los últimos ocho meses el mundo se acostumbrado a ver diariamente en las redes a infinidad de niños palestinos destrozados por las bombas en Gaza, mutilados o quemados, rotos y famélicos, velando a sus padres y hermanos, o deambulando solos y traumatizados entre los escombros de la Franja. Al menos 14.000 han muerto en los ataques israelíes, según el ministerio de Salud del enclave, una cifra que, sin embargo, no revela la magnitud plena del desastre infligido sobre la infancia de Gaza, donde representa cerca de la mitad de la población. Un nuevo informe de Save The Children cifra en 21.000 el número de niños palestinos desaparecidos desde el 7 de octubre. Un cómputo que incluye a aquellos que se cree que yacen bajo los escombros, enterrados en fosas comunes, detenidos por las tropas israelíes o separados de sus familias en el caos y los desplazamientos forzosos de estos meses.

“Es casi imposible recoger y verificar información en las condiciones imperantes actualmente en Gaza, pero al menos se cree que hay 17.000 niños no acompañados y separados (de sus familias) y otros 4.000 están probablemente desaparecidos bajo las ruinas, con un número indeterminado también en fosas comunes”, asegura el informe de la organización británica. Otros habrían sido arrestados y trasladados fuera de Gaza, en una clara vulneración de la Convención de Ginebra, un hecho que preocupa a la organización ante las persistentes denuncias del maltrato sistemático y la tortura al que se está sometiendo a los presos palestinos en las cárceles israelíes. 

“Cada día encontramos más menores no acompañados y cada día es más difícil brindarles apoyo”, sostiene el informe. “Los vecinos y parientes que han acogido a niños solos se las están viendo y deseando para cubrir sus necesidades básicas, como el alojamiento, la comida o el agua. Muchos están con extraños o completamente solos, lo que incrementa el riesgo de violencia, abuso, explotación o negligencia”. Este mismo mes, la Organización Mundial de la Salud aseguró que más de 8.000 niños en Gaza han sido tratados por malnutrición aguda, incluidos unos 1.600 que la padecen en su forma más extrema.

Trauma generacional

A nadie se le escapa que las consecuencias del asalto israelí sobre la infancia reverberarán en Gaza durante generaciones, complicando entre otras cosas que pueda surgir una cultura de paz en un enclave que solo ha conocido el bloqueo, el castigo colectivo, la guerra y la destrucción masiva desde hace más de dos décadas. “Llevamos trabajando en este ámbito más de 30 años, pero las dimensiones de lo que estamos viendo en Gaza ni siquiera las vimos durante la Segunda Guerra Mundial”, le ha dicho a Al Jazeera Khaled Quzmar, director general de Defense for Children International en Palestina. “Es una guerra contra los niños. Los niños de Gaza están pagando el precio más alto del genocidio israelí en la Franja”.

Lo más llamativo de todo es la reacción dispar de los grandes líderes occidentales frente a los 33 niños israelíes que murieron asesinados durante los ataques de Hamás del 7 de octubre y los miles de niños asesinados desde entonces por las tropas israelíes en Gaza y Cisjordania. La muerte de los primeros desató enérgicas condenas durante meses, mientras que los segundos raramente aparecen en los discursos oficiales.

Investigación independiente

“Como muchos han señalado, Gaza se convertido en un cementerio para los niños, con muchos miles más desaparecidos”, ha dicho Jeremy Stoner, el director regional de Save The Children para Oriente Próximo. La organización ha pedido una investigación independiente para que exista rendición de cuentas y los responsables de los crímenes puedan ser llevados ante la justicia. “Necesitamos desesperadamente un alto el fuego para encontrar y apoyar a los niños desaparecidos que siguen vivos e impedir que más familias sean destruidas”, ha añadido Stoner.