CARRETERAS

Transportes da un paso más para acabar con los atascos de la A1 en los accesos a Madrid

El Ministerio que dirige Óscar Puente adjudica el contrato para la redacción del proyecto del tercer carril en la A1 entre el Race y San Agustín de Guadalix por valor de 95 millones de euros

Vista de la A-1 (Madrid-Burgos), en sentido entrada a Madrid.

Vista de la A-1 (Madrid-Burgos), en sentido entrada a Madrid. / ANGEL DÍAZ

Elena Marín

Elena Marín

Los atascos de entrada y salida de Madrid por la A1 van camino de reducirse, aunque de momento a paso lento. El Ministerio de Transporte y Movilidad Urbana ha adjudicado la redacción del proyecto del tercer carril en esta autovía entre el RACE y San Agustín de Guadalix, un trayecto de apenas diez kilómetros pero que cuando la congestión viaria aumenta se tarda tiempo en recorrer.

El proyecto ha sido adjudicado por 3, 3 millones de euros, aunque el presupuesto de las obras asciende a 95 millones de euros. La licitación que se hizo pública hace cinco meses informaba que la redacción del proyecto, el primer paso antes de empezar a remover las tierras, podría extenderse hasta 24 meses, así que las obras no empezarán previsiblemente hasta finales de 2026.

Esta ampliación al tercer carril, entre el kilómetro 27 y 37, forma parte de un proyecto más amplio de mejora de la infraestructura viaria en la Comunidad de Madrid, pero las obras sobre el corredor no se pueden acometer a la vez porque provocaría problemas de circulación aún mayores, por lo que el ministerio ha priorizado este tramo junto al RACE porque es un espacio en el que ahora se pasa de tres a dos carriles y se generan muchas retenciones.

El tercer carril tendrá una anchura de 3,5 metros en todo el tramo y en cada sentido, salvo entre los enlaces del RACE y sur de Valdelagua (denominado Polígono Industrial Sur en el Anteproyecto), entre los que se diseña un cuarto carril de la misma anchura. Además, se prevé la construcción de nuevas vías laterales en ambos sentidos que permitirán el acceso a la calzada central y que transcurrirán por debajo de las estructuras de los distintos enlaces, que también se modificarán. De esta forma se evitan los riesgos y dificultades que generaban los trenzados actuales para el tráfico. Con este planteamiento se consigue que la ampliación de las calzadas centrales y las nuevas vías laterales se alcance reduciendo la ocupación necesaria para ampliar la capacidad de la autovía, que es el objetivo perseguido. Además, se construirán también tres pasarelas peatonales para el tránsito peatonal entre ambos lados de la autovía.

El Ministerio asegura que el objetivo de este proyecto es "mejorar la funcionalidad y la seguridad vial, así como disminuir la congestión de tráfico" lo que se alinea con los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030 del Gobierno de España.