Parla, Pinto, Getafe… la extrema derecha se hace fuerte en los municipios del sur de Madrid

"En Madrid, hasta ahora, el voto de Vox estaba en Núñez de Balboa, pero ahora crece en los municipios del sur". Con estas palabras refleja de manera gráfica un dirigente del PSOE madrileño la preocupación por el avance de la extrema derecha en espacios donde hasta ahora había conseguido entrar pero sin despuntar. Lugares que durante mucho tiempo han sido bastión del PSOE y de la izquierda, aunque en las últimas autonómicas el avance del PP hizo cambiar el color de algunos municipios de esta franja sur.

El crecimiento de Vox en España no es comparable al éxito que tienen sus partidos homólogos en otros países europeos. Pero la noche electoral en la sede de Vox se escuchó decir que ellos avanzan "poco a poco" y que confían en que el impulso de la extrema derecha en países como Francia, Alemania, Italia e incluso la vecina Portugal terminará llegando a España. En Europa la derecha radical y "patriótica", como se autodenominan en Vox, ha ido penetrando en los caladeros socialistas y obreros, barrios y municipios con desigualdades cada vez mayores y donde la inmigración ha crecido también en los últimos años. A esto último se agarran precisamente en Vox para decir que la "ola de éxito" de estos partidos se debe a su reivindicación de "naciones fuertes" con "fronteras bajo control".

En Madrid, de momento, donde más se ha notado ese avance es en los municipios del sur. Pero no solo por Vox sino por la suma de los de Abascal con la formación de Alvise Pérez, el agitador de la derecha extrema que ha cortocircuitado el ascenso de Vox en estas elecciones. Donde Rocío Monasterio, dirigente de la formación en Madrid obtuvo en 2019 porcentajes de voto que ese mueven entre el 7% y el 10%, la suma de ambos supera ahora el 15% y alcanza hasta el 19% en algunos de estos municipios del que fuera cinturón rojo de Madrid.

Es lo que ha ocurrido en Parla, por ejemplo, municipio en el que Vox se ha volcado en esta campaña. Vox crece punto y medio, pero Se acabó la fiesta irrumpe directamente con el 5,89% del voto. Algo similar sucede en Pinto, donde los de Abascal crecen más de dos puntos y Alvise se estrena con el 6,43%. La situación se repite, aunque con variaciones en los porcentajes, en Getafe, Móstoles, Fuenlabrada, Leganés, Alcorcón o Rivas. Todo el cinturón sur que un día fue fiel al voto a la izquierda.

La España de Se Acabó la Fiesta: ¿dónde han votado más a Alvise Pérez?

Rocío Monasterio busca el reflejo en la Francia de Marie Le Pen, donde dice que "el trabajo de muchos años ha tenido premio" ahora. La portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid ha vuelto a insistir este lunes al valorar los resultados en Madrid, donde el PP ha ganado con más del 40% del voto en la región, en que la "inseguridad" y la "inmigración ilegal" es lo que ha llevado a estos resultados en municipios como Parla. Y ha tendido prácticamente la mano a Alvise, a quien ve como un "aliado" y no como un "adversario" a pesar del mordisco que ha pegado a su electorado.

Frente a este incremento de la suma de las derechas radicales en el sur de la región, el portavoz socialista Juan Lobato ha destacado que el PSOE ha vuelto a ser "la fuerza más votada" en estos municipios. La debacle de Sumar ha provocado que donde Más Madrid empezaba a consolidarse haya caído en estas elecciones, como ha ocurrido en este cinturón del sur, voto que en parte se ha quedado en el PSOE y que Lobato intenta ahora capitalizar. "Hemos conseguido ganar cinco distritos en la ciudad de Madrid" y eso, dice el socialista, también es "un cambio cualitativo trascendental en la Comunidad de Madrid".

En el PSOE regional insistían este lunes que hay que tener "cuidado" con el discurso "racista" y "xenófobo" de la extrema derecha y "combatirlo siendo muy claros" con los ciudadanos, poniendo el foco en el "problema real" y no dejándose llevar por el miedo a los migrantes que pretenden implantar desde Vox. El cabeza de lista de Vox a las europeas lo repetía ayer mismo, insistiendo en que "el deterioro de la convivencia, de la inseguridad, de la inmigración masiva y descontrolada en países como Alemania, como Holanda o como Francia o Suecia (...) es lo que España puede ser en 10 años". 

La tesis del PSOE que se contrapone a este mensaje de la extrema derecha se resume en un tuit fijado por el dirigente socialista y que ha repetido durante esta campaña, en el que apunta que "el problema no es la migración sino desmontar los servicios públicos como hace el PP".