Aislar las ventanas del frío no es imposible: así es el elemento estrella de este invierno

Falta poco para que llegue a su fin el invierno, pero aún quedan los días más fríos. Y nada menos que con borrascas que han cubierto de nieve blanco media España dejando unas postales propias de película.

El invierno ha provocado al fin un descenso generalizado de las temperaturas, hecho que si bien forma parte del ciclo natural de las estaciones, puede resultar un incordio para aquellos que habían confiado en no tener que hacer el cambio de armario. Al menos no del todo.

Todo sobre los pellets, la forma más eficiente y ecológica de calefacción

Por otro lado, el pese a la bajada en la factura de luz y gas que se ha experimentado en los últimos días, son muchos los hogares los que procuran ahorrar en calefacción para afrontar los últimos días del invierno, motivada en buena medida por el aumento en la cesta de la compra. Así, no es extraño que se busquen mecanismos más artesanales y pequeños trucos para vencer el frío sin que sufra el bolsillo.

¿Cómo mantener la casa caliente sin gastar?

Este método para mantener cálido el hogar está siendo muy comentado estos días, y su uso puede complementarse con el de calefactores eléctricos de bajo consumo. De esta forma, las estancias principales de la casa siempre estarán cálidas por un coste bastante asequible. El secreto consiste en aislar las puertas y ventanas, por cuyas ranuras entra el frío (y se escapa el calor). Para ello, se propone como solución los burletes.

Los burletes son unas tiras de silicona u otro material que se colocan en la parte inferior de las puertas (entre el armazón y el suelo) o en los marcos de las ventanas, sellando estos espacios herméticamente. Existen distintos modelos disponibles en el mercado (véase tiendas físicas u online) y su instalación es muy sencilla.

¿Cómo se colocan los burletes?

El primer paso para colocar los burletes es limpiar la superficie a sellar con agua y jabón neutro, lo que facilitará su adhesión. Una vez limpia, se procederá a secar la zona y después a colocar la tira. Para ello, bastará con retirar el papel protector del material y adherirlo en el espacio deseado, ejerciendo presión durante unos segundos para asegurar su adhesión.

En caso de que sobre burlete, se procederá a cortarlo. Una vez hayamos terminado con el sellado, repetiremos el proceso en el resto de la estructura, pero procurando que la tira se mantenga siempre estirada.