TURISMO 'PETFRIENDLY'
Una de las mejores playas para perros de España deja de serlo y se desata la polémica en Noja: "Afectará al turismo"
El ayuntamiento cántabro deshabilita la playa de las Helgueras para los canes argumentando que la Policía recibe 50 denuncias al día por incumplimientos de las normas
Recogen 7.500 firmas para pedir al Consistorio de Noja que rectifique una medida que la había convertido en un destino de "referencia" del turismo 'petfriendly'
La perra Osha posa en la playa de Helgueras, la única habilitada para canes en Noja y en casi todo el Cantábrico. / EPE
"La medida supone un perjuicio para mucha gente, porque hay muchos viajeros que eligen su destino dependiendo de si pueden llevar o no a su perro. La playa de las Helgueras, además, se había convertido en una de las referencias de playa caninca de todo el litoral Cantábrico junto al Playón de Bayas". Miguel Llorente, propietario de la Casona del Carmen de Noja, que tiene en su oferta ocho apartamentos turísticos, es uno de los negocios que se ha visto perjudicado por la medida anunciada por el Ayuntamiento de la localidad en mayo y que ha provocado una pequeña rebelión vecinal, empresarial y turística.
Noja es una de las ciudades turísticas con más éxito de toda España. La mitad de las casas son de uso vacacional y su población pasa de 3.000 habitantes en verano a 100.000 en invierno. Desde 2018, se había convertido en un destino predilecto para los dueños de mascotas, al habilitar un tramo de unos 600 metros de la Playa de las Helgueras, hasta el monte Brusco, para uso y disfrute de los canes.
Perros sin bozal
Sin embargo, el Ayuntamiento de Noja, gobernado desde el año pasado por el PP, ha deshabilitado el tramo por el "constante incumplimiento de las normas", que hacen peligrar la Bandera Azul y la Q de Calidad Turística, según razona el Consistorio. Entre estas infracciones, que habrían provocado unas 50 llamadas diarias a la Policía Local en julio y agosto pasado, estaba no cumplir con la obligación de llevar los perros atados, de que los perros potencialmente peligrosos lleven bozal, de permanecer a seis metros de la orilla o de recoger excrementos.
Vista de la playa de Trengandín, que linda con la Playa de las Helgueras, donde se habilitaba un tramo para los perros hasta este año. / ALBA VIGARAY
Desde el Consistorio se razonaba que el acceso a esta zona habilitada -es una continuación de la playa de Trengadín, de cuatro kilómetros de largo- se realizaba através de una carretera que no es propiedad del Ayuntamiento, sino de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico "y no disponía de los servicios necesarios, como fuentes".
La medida ha provocado las críticas de muchos hosteleros que habían asumido la creciente demanda turística de la comunidad petfriendly. Desde la Casona del Carmen empezaron a recoger firmas el pasado 6 de junio en la plataforma Change.org para que el Consistorio eche atrás la prohibición de playa canina "que llevaba siendo un éxito y lugar de referencia en España desde el año 2018", cuando el Consistorio llegó a un acuerdo con Costas.
Ley de Protección Animal
"Hay que recordar que la nueva Ley de Protección y Bienestar Animal, aprobada en el Congreso de los Diputados en 2023, en su artículo 29 insta a los ayuntamientos a promover espacios en las playas para el esparcimiento de los animales de compañía", señala el escrito, que suma ya cerca de 7.500 firmas y donde se recuerda que existen, según el INE, más de nueve millones de perros registrados en España, "lo que indica una creciente necesidad de espacios públicos donde nuestras mascotas puedan disfrutar libremente".
"El turismo petfriendly es una realidad en alza en España, y las playas para perros son un componente vital de esta tendencia. En el caso de Noja, destino turístico de marcado carácter familiar, es especialmente preocupante. En un país donde casi la mitad de las familias conviven con una mascota, no puede promoverse el turismo familiar sin promover el turismo petfriendly", concluye el escrito. "Estaba viniendo mucha gente".
Perspectiva de la playa de Trengandín, en Noja. Al fondo de todo, se encuentra la Playa de Las Helgueras, que tenía una zona habilitada para perros. / ALBA VIGARAY
Para Llorente, su promotor, no se entiende que no pueda haber un espacio para mascotas cuando las dos playas de Noja -Trengandín y Ris- tienen en total cerca de siete kilómetros de longitud. "Tener 400-500 metros habilitados es un porcentaje muy pequeño y además está muy alejado del pueblo", explica Llorente.
"Contundente" informe
Ante el revuelo generado por la campaña, el Consistorio publicó un comunicado la pasada semana, donde reiteraba que la medida era una respuesta al "contundente" informe de la Policía local que refería que el alto volumen de llamadas recibidas por quejas de perros en las playas hacía "imposible que se prestara un servicio adecuado", ya que solo pudo atenderse una de cada diez. "A ello se suma", añadía el Consistorio, "que con esta magnitud de llamadas la Policía no pudo atender llamadas mucho más importantes" y "que sí requerían de su urgente presencia".
Para los promotores de la recogida de firmas, la solución no debería ser "atajar por lo sano" cerrando la playa, sino sancionar al que incumple. "Se está enviando un mensaje a todos los turistas con perro. Estamos dejando atrás a la mitad de las familias", prosigue Llorente, que se queja también de que si el Consistorio llevaba trabajando en la medida desde enero podía haberla anunciado antes de junio, ya que ha generado "mucho perjuicio a la gente". "Ahora los establecimientos tienen que convivir con las cancelaciones de última hora".
