INFORME DE NETURE IMPACT

Los mileniales son los más conscientes de que el cambio climático afectará a su vida y los que menos actúan para revertir la situación

Para los nacidos entre 1981 y 1996, la crisis económica, la sanidad, el empleo, la vivienda y los problemas políticos van por delante de la emergencia climática, muy por detrás que en la lista de preocupaciones del resto de generaciones

Miembros del grupo de acción climática Extinction Rebellion, durante una protesta en Bruselas en 2021.

Miembros del grupo de acción climática Extinction Rebellion, durante una protesta en Bruselas en 2021. / EFE

Ana Ayuso

Ana Ayuso

Entre las prioridades de los nacidos entre los años 1981 y 1996, la generación milenial, no se encuentra el cambio climático. Así lo desvela el informe El consumidor sostenible del 2034 en España, elaborado por Neture Impact, la consultora de impacto positivo de VML. De acuerdo con este estudio, los mileniales son los que menos preocupados están por este asunto, por detrás de la generación Z (1997-2012), para la que es el segundo factor de intranquilidad, la X (1965-1980), para la que es el tercero, e incluso los baby boomers (1946-1964), para los que es el cuarto.

Para los mileniales, la inquietud por el devenir del cambio climático de ahora a 10 años ocupa el sexto puesto en su lista de prioridades, por detrás de asuntos como la crisis económica, la situación de la sanidad, la calidad del empleo, la dificultad de acceso a la vivienda y los problemas políticos. "Eso tiene que ver principalmente con la vivencia económica de la generación milenial, la de la policrisis", apunta Xavier Vallés, Managing Director en Neture Impact.

"Se incorporaron al mercado laboral en plena crisis económica, que es algo que pasa una factura que muchísimas personas siguen pagando al permanecer instaladas en la precariedad desde ese momento. Cuando llega la ola de crecimiento económico, a ellos ya les pilla mayores. Han vivido la crisis del covid, que les ha vuelto a afectar, por lo que los mileniales, en cualquier encuesta que hacemos, priorizan siempre más los aspectos económicos que los colectivos, ambientales o sociales", razona. Por su parte, la generación Z "se está incorporando ahora al mercado laboral, en un contexto económico diferente y, además, es una generación que retrasa mucho su entrada al mercado, por lo que no tiene todavía tanta consciencia económica porque muchas veces no tienen esa autonomía". 

Sin embargo, los mileniales son los más conscientes de que su vida empeorará a causa del cambio climático: un 63% responden de manera afirmativa a esa premisa, frente al 54% de la población total. "Existe esa diferencia entre consciencia y conducta. Hay personas concienciadas en el sentido de que tienen información sobre el problema y reconocen que va a afectar a su vida, pero, en cambio, no creen que se tenga que atender, porque hay otros temas más urgentes que ese", refleja Vallés.

Anteponen otros aspectos que les han faltado durante las dos crisis que han marcado su incorporación al mercado laboral. "Esto no significa que cuando preguntemos a un milenial si está preocupado por el cambio climático nos vaya a decir que no, pero sí que denota que hay cosas más prioritarias para ellos y ahí está el trabajo que tenemos que hacer para que se entienda que el cambio climático es un fenómeno sistémico que haría que todos los aspectos que les preocupan se agravasen todavía más", incide el Managing Director de Neture Impact, una consultora que se dedica a "traducir" la ciencia ecológica en el idioma empresarial, implementar estrategias para que transformen su negocio "a todos los niveles" y el desarrollo de nuevas líneas de negocio sostenibles.

Miles de manifestantes protestan para demandar que los líderes políticos actúen contra el cambio climático, en la COP26 de Glasgow (2021).

Miles de manifestantes protestan para demandar que los líderes políticos actúen contra el cambio climático, en la COP26 de Glasgow (2021). / EFE

De preocupación a acción

Xavier Vallés declara que es "difícil" saber en qué medida la preocupación por el cambio climático "se traslada a la acción", pero lo que sí demuestra el informe de Neture Impact es que esa incertidumbre por la emergencia climática es "mayor por parte de la ciudadanía, principalmente porque se manifiesta en nuestra vida de forma más recurrente".

"Casi el 80% de la población sufre olas de calor, hay mucha parte de la misma que vive en entornos más secos, como el catalán o el andaluz, que experimentan sequías, y esto hace que la sostenibilidad y el cambio climático ya no sean aspectos distantes o de futuro, sino de proximidad y de presente", dice el Managing Director de Neture Impact.

El 50% de los encuestados asegura que sus niveles de preocupación por el devenir del medioambiente han aumentado en el último año. Las mujeres han incrementado su desasosiego por el cambio climático 11 puntos por encima que los hombres.

El 50% de los encuestados asegura que sus niveles de preocupación por el devenir del medioambiente han aumentado en el último año

También crecen los negacionistas, cree Vallés, porque "la generación Z está muy polarizada", aunque aún es "un fenómeno muy residual en España". "Sólo un 10% de la población en términos generales niega que exista un problema -que el clima de la tierra se esté transformando de forma acelerada-, pero cómo se configura este aspecto entre las distintas generaciones varía".

"En el caso de la Gen Z, lo que encontramos es casi tres grupos de igual dimensión: los muy comprometidos con el cambio climático, los que no tienen una opinión marcada aunque reconocen el problema y los negacionistas, que tienen una vinculación ideológica muy fuerte hacia posiciones políticas de base negacionista y que se manifiesta también en el voto europeo, mucho más común en hombres que en mujeres", sostiene. 

Empresas: problema y solución

Ante la pregunta '¿quiénes contribuirán más a acelerar la transición ecológica?', el 57% de los encuestados confían en los gobiernos, el 54% en los científicos y tecnólogos, el 51% en sí mismos, en la ciudadanía, y, ya por detrás, un 47% creen en las empresas. Los sondeados crecentistas que eligen al sector privado como primera opción del eje de cambio son la mitad (9,9%) que los que confían principalmente en los gobiernos (18,6%) y en la ciudadanía (22%), de acuerdo con este informe.

Un 27,5% de los decrecentistas, quienes siguen la teoría que plantea reducir la economía para limitar la producción, el consumo de energía y el uso de los recursos, eligen a los gobiernos como primera opción de cambio, por delante de los científicos (25,1%) y las empresas o la ciudadanía (12,6% en ambos casos).

El 57% de los encuestados considera que las empresas son las principales responsables del cambio climático, a lo que Xavier Vallés responde que "una cosa está muy relacionada con la otra". Por su parte, el 59% asegura que los gobiernos no están dando los pasos adecuados en la lucha contra esta emergencia.

"Sobre las empresas recae el peso de la culpa. Se considera no sólo que no pueden contribuir a la solución, sino que son la parte fundamental del problema. Cuando hablamos de los combustibles fósiles, nos encontramos con que hay compañías que promueven su utilización y su consumo y el hecho que haya personas, colectivos y empresas que se enriquezcan con los combustibles fósiles genera mucha percepción de que son parte del problema y no de la solución", ejemplifica. 

No obstante, las empresas, "los cuartos en discordia", son los agentes "más preparados para resolver el problema". "Solamente con la regulación, no llegamos a cumplir los objetivos que tenemos. Este es parte del problema que vive la sostenibilidad, que en gran medida las empresas todavía están instaladas en el ámbito del cumplimiento", dice Vallés, por lo que "muchas empresas ya están trascendiendo a la legislación y son sostenibles económicamente, con modelos de negocio pensados a orientarse hacia la transición ecológica", concluye.