CÁNCER

Luz verde a la inmunoterapia que destierra la quimio en uno de los linfomas más frecuentes

Sanidad financia un nuevo tratamiento, basado en tecnología de anticuerpos y sin quimioterapia asociada, para pacientes adultos con linfoma folicular, una enfermedad incurable

Imagen de microscopia de un linfoma desarrollado por ratones con alteraciones en el gen VAV1

Imagen de microscopia de un linfoma desarrollado por ratones con alteraciones en el gen VAV1 / Xosé R. Bustelo. EFE

Nieves Salinas

Nieves Salinas

El Ministerio de Sanidad ha dado luz verde a la financiación de un nuevo tratamiento, basado en tecnología de anticuerpos y sin quimioterapia asociada, para pacientes adultos con linfoma folicular (LF), una enfermedad incurable en la que las recaídas son frecuentes, con resultados que empeoran en cada tratamiento consecutivo. 'Mosunetuzumab' es el primer y único anticuerpo biespecífico aprobado y financiado en nuestro país para estos pacientes, de administración finita y disponible en el hospital, por lo que estas personas no tienen que esperar para iniciar el tratamiento.

En España se diagnostican cerca de 2.000 casos al año de LF4, el más común de tipo indolente (de crecimiento lento) de linfoma no Hodgkin. A pesar de los avances, la dolencia sigue considerándose incurable. El nuevo tratamiento, de la farmacéutica Roche, está indicado para pacientes con linfoma folicular en recaída o refractario (que no responden al tratamiento) y que hayan recibido al menos dos terapias sistémicas previas.

Supervivencia

El objetivo terapéutico en estos pacientes, tal y como explica el doctor Juan Manuel Sancho, jefe del Servicio de Hematología del Hospital Universitario Trías i Pujol ICO Badalona (Barcelona) y coordinador del Grupo de Trabajo de Linfomas Indolentes en el Grupo Español de Linfomas y Trasplantes de Médula Ósea (GELTAMO), "es aumentar la supervivencia global con una buena calidad de vida".

Los nuevos tratamientos, "además de ser más eficaces, deberían tener un mejor perfil de toxicidad respecto a los convencionales", señalan los médicos

Esto, añade el médico, implica que los nuevos tratamientos, "además de ser más eficaces, deberían tener un mejor perfil de toxicidad respecto a los convencionales, que se han basado clásicamente en quimioterapias citotóxicas". En este contexto, continúa, "la disponibilidad de 'mosunetuzumab' viene a cubrir una necesidad terapéutica en el LF, concretamente en aquellos que sufren dos o más recaídas y que, por lo tanto, ya han recibido con toda probabilidad pautas de quimioterapia en los tratamientos previos".

Recaídas comunes

Este experto insiste además en que al tratarse de una enfermedad donde las recaídas son comunes, "la administración de tratamientos clásicos basados en quimioterapia conlleva una toxicidad acumulativa y, de forma paralela, una disminución de la eficacia, de modo que el intervalo entre tratamientos es cada vez menor con las terapias estándar.

La nueva opción, basada en tecnología de anticuerpos y sin quimioterapia asociada, se une a las células del sistema inmune del propio paciente (linfocitos T)

La nueva opción, basada en tecnología de anticuerpos y sin quimioterapia asociada, se une a las células del sistema inmune del propio paciente (linfocitos T) para redirigirlas de manera específica contra las células linfoides tumorales. De este modo, "se evita en gran medida el efecto dañino que tiene la quimioterapia sobre células sanas, a la vez que mantiene una gran eficacia antitumoral", añade.

Disponible en el hospital

'Mosunetuzumab' es un tratamiento de duración finita, por lo que los pacientes podrán reducir sus visitas al hospital. Para el doctor Sancho, esta es una de las ventajas, pero hay otras muchas como disponer de una terapia más eficaz y menos tóxica respecto a los tratamientos que se han utilizado; que es ambulatorio, por lo que no requiere hospitalización, y que tiene una disponibilidad inmediata en caso de que un paciente lo precise.

Un paciente recibe un tratamiento de quimioterapia.

Un paciente recibe un tratamiento de quimioterapia. / EPE

Añade el beneficio para el Sistema Nacional de Salud de "disponer de terapias más eficaces y menos tóxicas supone retrasar más los tratamientos futuros. Se amplía el período libre de tratamiento y al disminuir la toxicidad de la quimioterapia se reduce también la carga asistencial y económica que pueden conllevar las terapias con este tipo de efectos secundarios".

Hospitales españoles

La aprobación de la nueva terapia se ha basado en los resultados positivos del estudio fase I/II GO29781, en el que han participado cuatro hospitales españoles (Vall d'Hebron de Barcelona, Clínica Universitaria de Navarra, La Paz de Madrid y el Clínico de Salamanca).

El estudio alcanzó su objetivo primario, mostrando altas tasas de respuesta completa y respuesta objetiva, un 60% y 80% respectivamente, y un perfil de seguridad favorable en pacientes con FL muy pretratados. Los datos del análisis de seguimiento a tres años mostraron respuestas duraderas mantenidas en el tiempo y un perfil de seguridad manejable tras el tratamiento, presentando una mediana de supervivencia libre de progresión de 24 meses, informa Roche.