ENFERMEDADES INFECCIOSAS

Europa alerta del contagio del virus Oropus en turistas españoles e italianos procedentes de Cuba

La enfermedad se transmite por la picadura de mosquitos vectores y hasta el momento no se ha documentado ningún caso de transmisión de persona a persona

¿Qué es la fiebre oropouche, la enfermedad que ha reaparecido en países de América Latina?

El ECDC recomienda a los viajeros que regresen de áreas endémicas estar atentos a los síntomas

El ECDC recomienda a los viajeros que regresen de áreas endémicas estar atentos a los síntomas / EFE

Marta Alberca

Marta Alberca

La Organización Mundial de la Salud (OMS) lleva desde el comienzo de año advirtiendo de la reaparición de fiebre del Oropuche en algunos países de América del Sur. Hasta ahora no había llegado a Europa, pero el Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades (ECDC) acaba de emitir una alerta después de haber confirmado hasta 6 casos de virus Oropus en varios turistas españoles e italianos que viajaron a Cuba y, en su regreso a casa, manifestaron síntomas propios de la enfermedad: fiebre alta, escalofríos y otros que se parecen a los de la gripe. El primer caso se registró en junio en Italia y el paciente pasó hasta 4 días hospitalizado.

La enfermedad es endémica de América del Sur, aunque hasta el día de hoy no se ha tenido constancia de muertes derivadas de una enfermedad que, principalmente, se transmite a través de mosquitos y moscas que no viven en Europa. Por esta razón, los expertos del ECDC quieren dejar claro que el riesgo de propagación del virus Oropus por Europa es "muy bajo", pero aún así, recomiendan a los viajeros que regresen de áreas endémicas como América del Sur, estén atentos a los síntomas si tienen sospechas de haberse expuesto a la enfermedad.

¿Qué es este virus?

Sus síntomas son muy parecidos al de el dengue: aparición repentina de fiebre alta, dolor de cabeza, mialgias, erupción cutánea, dolor en las articulaciones, vómitos. Tiene una duración de entre tres y seis días, y normalmente de carácter leve (aunque, en ocasiones, provoca complicaciones graves). A menudo se produce una breve reaparición de los síntomas y, en pocos casos, provoca una meningitis aséptica con signos como dolor de cabeza, fiebre, rigidez en el cuello, malestar general, fatiga o sarpullido.

No existe actualmente ningún tratamiento específico para la fiebre del Oropouche, por lo que el abordaje se centra en el alivio sintomático del enfermo (reposición de líquidos, control de la temperatura corporal, administración de analgésicos...) y en el control de las complicaciones que puedan surgir. Los esfuerzos, por tanto, se centran más en el ámbito de la prevención. En este sentido, son importantes medidas como el uso de repelentes para insectos y telas mosquiteras, la correcta gestión de las aguas y la fumigación y eliminación de los criaderos de mosquitos vectores cercanos a las áreas habitadas.