PREVISIONES

Las mujeres de hoy tienen un hijo menos de media que en 1990 y eso ayudará a que el medio ambiente sufra menos presión

Naciones Unidas prevé que el planeta alcance su 'pico' de población en el 2080, pero perderá 700 millones de habitantes en 20 años

A finales de los setenta las personas que tienen 65 o más años superarán a los menores de 18

La población mundial seguirá creciendo hasta la década de los 80, después descenderá.

La población mundial seguirá creciendo hasta la década de los 80, después descenderá. / EFE (ARCHIVO)

María G. San Narciso

María G. San Narciso

La población mundial va a alcanzar durante este siglo su 'pico' máximo. Si ahora hay alrededor de 8.200 millones de personas habitando el planeta, la cifra irá en aumento hasta los ochenta, cuando se alcancen unos 10.300 millones. Después comenzará a disminuir, hasta el punto de que en 2100 habrá perdido 700 millones de habitantes, según nuevas proyecciones de la ONU. Los funcionarios aseguran que estos datos, a los que achacan, en buena parte, a la baja natalidad y a la igualdad de género, ofrecen la esperanza de una menor presión sobre el medio ambiente.

En su informe Perspectivas de la población mundial 2024, elaborado por el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales, la ONU calcula que los 8.200 millones de habitantes van a ir creciendo hasta un máximo de 10.300 millones. A partir de ahí, sus predicciones es que empiece a producirse un descenso poblacional. ¿El motivo? El principal es la baja natalidad de las mayores economías del mundo, especialmente la de China, donde la tasa de fertilidad es menor que 1,4 hijos por mujer. 

De media, apuntan, las mujeres del mundo tienen en la actualidad un hijo menos por mujer en edad fértil que los que tenían en 1990. "Actualmente, la tasa de fecundidad mundial es de 2,3 nacimientos vivos por mujer frente a 3,3 nacimientos en 1990. Más de la mitad de todos los países y zonas del mundo tienen una fecundidad inferior a 2,1 nacimientos por mujer, el nivel necesario para que mantengan un tamaño constante en el largo plazo sin migración", indican.

También señalan que elevar la edad legal para contraer matrimonio e integrar la planificación familiar en el Atención Primaria puede mejorar la educación de las mujeres, su participación económica y reducir la maternidad. "Los avances en la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres pueden ayudar a crear sociedades donde todas las parejas e individuos puedan alcanzar el tamaño de familia deseado -anotan en el informe- ayudando potencialmente a contrarrestar el rápido crecimiento o la disminución de la población". 

Otra razón que está detrás de estas previsiones es el descenso de la tasa de mortalidad y una mayor esperanza de vida, que tras la epidemia del Covid-19 ha vuelto a subir hasta los 73,3 años. Calculan que a finales de la década de los 50 más de la mitad de la población morirá los 80 años.

Una buena noticia

En general, según la ONU, una población más baja es una buena noticia. Li Junhua, subsecretario general de Asuntos Económicos y Sociales, ha señalado que es sinónimo de "una presión ecológica más baja del impacto humano debida a un consumo agregado más reducido".

Entre los países que se espera que se mantengan en un rango cercano al tamaño de su población actual hasta 2054 está España. La ONU cree que esta estabilización puede crear oportunidades adicionales para erradicar la pobreza, ampliar el acceso a la atención médica y la educación, promover la igualdad de género, mejorar los sistemas de protección social, avanzar hacia patrones de producción y consumo más sostenibles y promulgar medidas para proteger el medio ambiente y mitigar los efectos negativos del cambio climático.

Las migraciones, factor clave

En 50 países del mundo, entre los que incluyen Estado Unidos o Canadá, la emigración atenuará los efectos de una población en declive y cada vez más anciana: la llegada de emigrantes aumentará la natalidad y rejuvenecerá levemente la edad media de la población.

Porque a finales de la próxima década de los setenta, habrá en el mundo más personas mayores de 65 años que las menores de 18, y mayor número de ancianos (de más de 80) que de lactantes menores de un año.