Reino Unido
El nuevo laborismo de Keir Starmer, el próximo primer ministro británico
El mes pasado una joven interrumpía a gritos un discurso de Keir Starmer. El líder le recordaba entonces su idea del nuevo laborismo británico: "Renunciamos a ser un partido de protesta hace cinco años". Starmer abandonó el estilo agresivo de su antecesor, Jeremy Corbyn. Y planteó la pelea contra la hegemonía 'tory' en otros términos. Compensando su falta de carisma con unos modales exquisitos. Y se ha limitado a no cometer grandes errores mientras veía caer a primeros ministros conservadores, incapaces de guarecerse ante el chaparrón que se les venía encima. El enigma es qué hará este abogado de 61 años cuando, como se prevé, el rey le encargue formar gobierno. Porque no ha concretado en qué consistirá el "Cambio" que ha elegido como lema de campaña. Habla de acabar con el caos y crear riqueza. Dando pocos detalles de hasta dónde piensa implantar políticas de izquierdas en asuntos como la inmigración, los impuestos o la nacionalización de servicios públicos clave.
