El ya embajador del Estado de Palestina en España: “La justicia tarda, pero siempre llega”

La planta baja de la (ya formalmente) Embajada del Estado de Palestina en España estaba atestada de medios de comunicación este martes. Pocas horas antes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, realizaba una declaración oficial desde el Palacio de la Moncloa, en español y en inglés, dando reconocimiento a Palestina como un Estado más; como Israel, Francia o Malta.

Presidía la sala de la delegación palestina una réplica del Guernica de Picasso, pero con los colores de la bandera palestina (verde, rojo, negro y blanco). El embajador, Husni Abdel Wahed, en español casi perfecto atendía a los medios con una de cal, y otra de arena. Es un día alegre, dijo, por el reconocimiento; pero también triste, porque pocas horas antes Israel ha perpetrado una nueva masacre en el sur de Gaza, con al menos 21 muertos, según fuentes palestinas, e imágenes de cadáveres de menores sobre la arena gazatí. 

Wahed ha expresado este martes su "profundo agradecimiento" al paso dado por el Gobierno de España, junto al de Irlanda y Noruega, a la hora de reconocer al Estado de Palestina. Se lo ha agradecido especialmente al "pueblo español", y ha recordado cómo Madrid fue clave en las negociaciones de paz a principios de la década de los noventa que desembocaron en los Acuerdos de Oslo; lo más cerca que ha estado la región de la paz. Para el palestino, la decisión de Pedro Sánchez es una demostración de que España está con el "compromiso de buena parte de la comunidad internacional con la paz, la justicia y la libertad".

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El cambio tiene efectos jurídicos importantes, ha dicho el embajador. Entre otros, Palestina será tratada en pie de igualdad con otros países. Respeta la decisión de España de no abrir una embajada en Ramala, como sí ha decidido hacer otro de los países reconocedores, Irlanda. Ramala es la capital de facto del Estado palestino, sede de sus ministerios y del palacio presidencial, la Mukata, donde está el presidente palestino, Mahmoud Abbás. El jefe de la diplomacia española, José Manuel Albares, ha explicado en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros que la representación española hacia el nuevo Estado reconocido seguirá ejerciéndose desde el Consulado de Jerusalén por el cónsul general. Un consulado que, ha recordado Abdel Wahed, funciona en Jerusalén Este (la capital de iure palestina) desde 1853 y fue el único consulado europeo que se mantuvo abierto durante la primera guerra mundial.

"El modelo de la representación de los países depende de los acuerdos bilaterales. Nosotros, si bien deseamos que la representación sea al más alto nivel, una vez más respetamos la voluntad y las políticas de los países amigos", ha dicho.

Lo que sí ha solicitado al Gobierno español es que exima de la necesidad de pedir visado a los palestinos, como contramedida a la orden del Ejecutivo israelí de prohibir al Consulado atender a los palestinos de Cisjordania. Una medida cuya legalidad ya estudia el servicio legal internacional del Ministerio de Exteriores español, según ha confirmado Albares este martes.

Reconocimiento de Israel

El embajador palestino ha recordado que ellos reconocen al Estado de Israel, "en el 78% del territorio de la Palestina histórica", pero que Tel Aviv se niega a hacer lo propio con el Estado palestino. Acusa al Gobierno de Benjamín Netanyahu de deshumanizar a los palestinos, y de tratar de identificarlos con "una corriente", en referencia velada a Hamás. El Gobierno palestino de Ramala es del partido rival, Al Fatah, que colabora en cuestiones de seguridad con Israel.

Abdel Wahed desea que haya una confernencia de paz, pero teme que no sea posible en estas circunstancias en las que Estados Unidos sigue apoyando "el genocidio" que Israel está cometiendo en Gaza. Allí han muerto al menos 36.000 palestinos, de ellos 14.000 niños, en ocho meses de represalia israelí por los ataques de Hamás del 7 de octubre, con al menos 1.154 muertos; de ellos, 30 niños.

"Afortunadamente, con el paso del tiempo se ha demostrado que el pueblo palestino es un pueblo como cualquier otro: no somos héroes, somos gente común y corriente" ha argumentado. "Lo que pretendemos es vivir igual que todos los pueblos, como un pueblo común y corriente, en paz y libertad". Y ha añadido: "La justicia tarda, pero llega".

"Lo que ha hecho Sánchez y demás países (Irlanda y Noruega) es luchar en contra del genocidio, luchar por la justicia, por la libertad, por la humanidad, por la paz", ha rematado el embajador del Estado de Palestina en España.