HOSTELERÍA

España cerró en 2023 más bares que en cualquier año de la última década: "La retirada de terrazas covid ha sido fundamental"

Emilio Gallego, de Hostelería de España, sostiene que "siempre que se pierden espacios y ocasiones de consumo, alguna categoría de bebidas puede verse afectada"

Los españoles consumen menos cerveza y aguas minerales, pero más refrescos sin azúcar y cócteles: "Se producen vasos comunicantes"

Terrazas en el barrio madrileño de Ibiza durante la pandemia.

Terrazas en el barrio madrileño de Ibiza durante la pandemia. / Alba Vigaray

Ana Ayuso

Ana Ayuso

El Informe Socioeconómico del sector de la cerveza en España 2023, elaborado por la Asociación de Cerveceros de España y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, ya desvelaba hace unas semanas la caída en uno de los productos más demandados de nuestro país. El consumo global ascendía un 2,84% respecto al año anterior, pero el dato se sostenía gracias a los turistas extranjeros. Los españoles habíamos bebido un 3,53% menos de cerveza.

También ha registrado una "ligera caída", indican para EL PERIÓDICO DE ESPAÑA desde la Asociación de Aguas Minerales de España (Aneabe), el consumo de aguas embotelladas naturales y con gas. No ocurre lo mismo, en cambio, con los refrescos. La Asociación de Bebidas Refrescantes (Anfabra), que presentará los resultados del sector la semana que viene, ha adelantado a este diario que su perspectiva es más prometedora que la del agua y la cerveza: "Si el ocio sigue vivo y las perspectivas del turismo y su impacto en hostelería son buenos, confiamos en un buen comportamiento del sector de las bebidas refrescantes", sostiene la directora general, Beatriz Blasco Marzal.

Emilio Gallego, secretario general de la Confederación Empresarial de Hostelería de España, asegura que "la bajada de la cerveza no es significativa": "No lo consideramos un cambio de tendencia ni una alteración fundamental en pautas de consumo. Pueden influir circunstancias meteorológicas o algo que nosotros creemos que tiene gran importancia: se han reducido momentos de consumo con el levantamiento de las superficies que antes ocupaban terrazas covid".

"Siempre que se pierden espacios y ocasiones de consumo, alguna categoría de bebidas puede verse afectada", dice el secretario general de la patronal de hostelería. Los cierres de establecimientos de alimentación y bebidas se venían observando desde hacía tiempo, pero en 2023 la incidencia fue notablemente mayor. "Veníamos teniendo una década con una reducción de unos 2.000 establecimientos al año, 20.000 en una década, y el año pasado el cierre de bares ascendió. Es un crecimiento importante y la retirada de terrazas covid ha sido el problema fundamental que ha afectado a estas clausuras". 

Siempre que se pierden espacios y ocasiones de consumo, alguna categoría de bebidas puede verse afectada"

Emilio Gallego

— Secretario general de la Confederación Empresarial de Hostelería de España

Así lo certifican los datos que la Confederación Empresarial de Hostelería de España ha trasladado a este periódico. La patronal hace una división del total de lo que denomina "servicios de comidas y bebidas" en restaurantes y puestos de comidas, provisión de comidas preparadas para eventos y otros servicios de comidas y, finalmente, los establecimientos de bebidas. En este último estrato, España contaba en 2020 con 182.595 locales, que se redujeron notablemente durante los años duros de la pandemia, a 175.029 y 175.890 establecimientos en 2021 y 2022, respectivamente.

Sin embargo, la bajada más sorprendente llegó durante el año pasado: 2023 cerró con 163.491 bares de bebidas, un 7% menos con respecto al ejercicio anterior, que ya había sido poco esperanzador. "Las terrazas covid supusieron un crecimiento muy importante. Establecimientos que no tenían terraza la tuvieron durante el covid, porque era la única manera de poder funcionar y, ahora, han vuelto a no tenerla. Al desaparecer estos muchos miles de metros cuadrados de terraza tiene una afectación. Y, sin duda, ha contribuido al cierre de bares", zanja Emilio Gallego.

Los restaurantes y cáterin también experimentaron esta tendencia: echaron la persiana 2.799 establecimientos de los primeros (un 3,3% con respecto a 2022) y 810 de los segundos (4,1%). No obstante, ambos tipos de negocio registraron un aumento notable en la apertura de este tipo de locales en 2022, por lo que la bajada no resulta tan significativa como en los bares de bebidas.

Regiones en las que han cerrado más bares

Todas las regiones españolas, incluidas Ceuta y Melilla, sufrieron cierres de bares en 2023, en comparación con los datos del año anterior. En toda España se clausuraron un 7% de locales de bebidas, lo que se traduce en 12.399 establecimientos.

Si se compara con los registros de 2018, la caída es aún mayor, de un 10,8%: España tiene casi 20.000 bares menos que en ese año prepandémico. La Comunidad de Madrid fue la región más damnificada, con un 12,7% menos de bares en 2023. El Ayuntamiento de Almeida había autorizado durante la crisis del covid 682 terrazas en bandas de estacionamiento (sólo en la ciudad de Madrid), principalmente distribuidas en los distritos de Salamanca, Chamberí y Arganzuela, tal y como desveló Más Madrid a este diario a partir de datos municipales.

Le siguen Melilla, con un 8,9% menos, Extremadura, con una bajada del 8% y Navarra, con un 7,8% menos de bares. Las menos afectadas por el cierre de establecimientos de bebidas durante el año pasado fueron La Rioja (-3,1%), País Vasco (-4,3%) y Cantabria (-4,3%).

Las modas de la coctelería y los refrescos sin azúcar

"Se producen habitualmente esos vasos comunicantes entre unas categorías de productos y otras. Seguramente, si analizáramos cómo están las distintas categorías, nos encontraríamos que unas bajan un poco, que otras suben", asegura el secretario general de la Confederación Empresarial de Hostelería de España.

Pictura, la sección de cócteles en el bar del Hotel Ritz, en Madrid.

Pictura, la sección de cócteles en el bar del Hotel Ritz, en Madrid. / Alba Vigaray

"Suele haber pequeñas compensaciones", indica Emilio Gallego, que añade además que "la aparición de modas y otras tendencias puede beneficiar a ciertas bebidas". 

Es lo que ocurre, al parecer, "con la coctelería", aunque, de acuerdo con los resultados presentados hace unas semanas en el Congreso de Bebidas Espirituosas que se celebró en Jerez, "dentro de las bebidas alcohólicas, vemos una ligera bajada de la ginebra y una pequeña subida del ron y del whisky".

"Es cierto que nos movemos en un contexto de inflación que afecta al bolsillo de los consumidores y a los hábitos de consumo. Sin embargo, el consumo en hostelería y muy especialmente los momentos más vinculados al ocio y al disfrute resiste, y estos son los principales momentos de consumo de bebidas refrescantes en España. Por tanto, desde el sector, somos optimistas y esperamos mantenernos en la senda de recuperación de los últimos años", confía la directora general de la Asociación de Bebidas Refrescantes.

El consumo de bebidas refrescantes en España es, dice, "social" y está asociado a momentos de "ocio y disfrute". Desde Anfabra señalan que han observado otra tendencia positiva. Se trata del crecimiento de "las variedades sin azúcar, que ya representan más del 60% de las bebidas refrescantes que se comercializan en España", apunta.