MONTEGANCEDO

Los pozueleros salen a la calle para proteger su monte

El próximo 7 de julio los pozueleros que deseen pueden concentrarse en una marcha en contra de los planes para el bosque de Montegancedo

Diversas asociaciones ecologistas se oponen al plan del ayuntamiento

Diversas asociaciones ecologistas se oponen al plan del ayuntamiento / Plataforma Salvemos Montegancedo

Clara Domínguez Pacho

El 1 de julio, diversos grupos ecologistas denunciaron el inicio de lo que describieron como un "ecocidio" en el Parque Periférico de Montegancedo, en Pozuelo de Alarcón (Madrid).

Estos colectivos señalaron que se están destruyendo hábitats naturales cruciales durante la época de cría, incluyendo dehesas de encinas centenarias, pinares y bosques, que son vitales para la biodiversidad y sirven como áreas de alimentación y caza para especies protegidas como el águila imperial.

Los ecologistas informaron que las medidas cautelares presentadas para detener la tala no fueron admitidas, "a pesar de que la evaluación de impacto ambiental requerida por ley no se ha completado".

Además, han expresado su apoyo a los vecinos de la plataforma Salvemos Montegancedo: "No están solos en su protesta; cuentan con el respaldo de una veintena de organizaciones ambientales y de la sociedad civil".

Concentración en Defensa de Montegancedo

En respuesta a esta situación, los ecologistas han organizado una concentración para el domingo 7 de julio a las 10:30 horas en la urbanización La Cabaña y a las 11:30 frente al Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón.

"Insistimos en que este es uno de los primeros ecocidios anunciados bajo el amparo de la ley ómnibus, aprobada recientemente por la Comunidad de Madrid, que permite que Ayuntamientos en connivencia con promotores urbanísticos depreden lo mejor de nuestra naturaleza", manifestaron los organizadores.

Voces de la Comunidad

Patricia Cabal, portavoz de Somos Pozuelo, comentó sobre el proyecto: "Montegancedo ha sido un proyecto que llevaba muchos años pendiente, pero lo aprobaron en plena pandemia.

Es un bosque con encinas y pinares, y planean talar miles de árboles para construir una urbanización supuestamente sostenible.

Las viviendas que construirán serán de lujo, inaccesibles para la mayoría. Además, el informe medioambiental es obsoleto y no refleja la actual riqueza natural del área. Estamos en contra de destruir este paraje natural".

Helio Cobaleda, portavoz del PSOE en Pozuelo, agregó: "Han talado más de 100 árboles, de los 1000 autorizados en unos permisos incomprensibles y quizás ilegales que ha dado el Ayuntamiento de Pozuelo para que se construyan más de 1000 viviendas en una zona que debía estar protegida".

El Contexto del Proyecto

El proyecto de urbanización en Montegancedo ha suscitado fuertes críticas debido a la destrucción de un entorno natural único.

Las viviendas planeadas, descritas como de súper lujo, no estarán al alcance de la mayoría de los ciudadanos de Pozuelo, generando preocupación sobre la equidad y el acceso a la vivienda.

Además, la falta de una evaluación medioambiental actualizada y adecuada ha sido un punto central de controversia, ya que muchos temen que la biodiversidad y los hábitats esenciales se pierdan irreversiblemente.

Montegancedo es un área de gran valor ecológico y cultural. Las encinas centenarias y los extensos pinares que cubren el parque no solo son importantes para la fauna local, sino que también representan un patrimonio natural de la región.

La tala de estos árboles amenaza con alterar significativamente el equilibrio del ecosistema, afectando tanto a las especies animales como a las comunidades humanas que disfrutan y dependen de este espacio natural para su bienestar y recreación.

La ley ómnibus, recientemente aprobada por la Comunidad de Madrid, ha sido objeto de controversia y críticas, ya que muchos la consideran una herramienta que facilita la explotación urbanística a expensas del medio ambiente.

Esta ley permite a los Ayuntamientos y promotores urbanísticos llevar a cabo proyectos sin las debidas salvaguardas medioambientales, lo que ha encendido alarmas entre ecologistas y ciudadanos preocupados por la conservación de los espacios naturales.

La situación en Montegancedo se ve como un ejemplo claro de los peligros que esta legislación puede conllevar.